La enfermería confía en las prórrogas de contratos para cubrir el verano

Este año, la Consejería de Sanidad, en palabras de su titular, Alejandro Vázquez, prevé un verano «francamente duro». Esa fue su conclusión tras la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud celebrada este miércoles. El representante castellano y leonés, al igual que sus homólogos en comunidades gobernadas por el Partido Popular (PP), reclamaron a la ministra de Sanidad, Mónica García, «medidas puntuales» para sustituir las vacaciones de los profesionales. Sin embargo, la titular de la política sanitaria nacional «ha asumido también que se van a cerrar dispositivos de Atención Primaria y que algunos servicios hospitalarios es posible que tengan déficit», manifestó Vázquez a la salida del encuentro.

Dentro de ese escepticismo con el que se afronta el verano, el sindicato profesional de enfermería Satse en Segovia muestra su confianza en la «renovación hasta octubre» de contrataciones que hizo Sacyl en el área de salud, tanto en el ámbito hospitalario como en el primer nivel asistencial de los centros de salud y consultorios. Así lo manifiesta la secretaria general de la organización en la provincia, Miriam Rubio, quien añade que, como consecuencia de estas prórrogas, «contamos con más de 200 contratos por encima de plantilla». Este escenario es el que alimenta la esperanza de la responsable sindical de que «permita dar cobertura a todos los periodos de vacaciones y diferentes permisos y licencias que vayan surgiendo, así como a incidencias que requieran su cobertura».

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El pero sobre el que pone el foco crítico la secretaria provincial de Satse es que «la peor parte, como viene siendo habitual, se la lleva el sector sociosanitario, tanto público como privado». En las residencias de mayores y centros de atención a la discapacidad «es más complicado encontrar enfermeras y enfermeros por las pésimas condiciones laborales» en las que han de llevar a cabo sus tareas.

La central profesional viene desde hace tiempo denunciando la precariedad en el trabajo, e incluso ha llevado algunos casos ante la justicia y ha denunciado el «maltrato» al personal de enfermería ante la Inspección de Trabajo.