José Francisco, el conductor de 49 años que sufrió una parada cardiorrespiratoria cuando conducía su vehículo por la carretera de La Granja (CL-601), apenas tardó unas horas en acudir a la comandancia de la Guardia Civil en Segovia para mostrar su agradecimiento en persona ... a Víctor y Alberto, los dos agentes que le salvaron la vida gracias a las maniobras de reanimación que le realizaron en la misma calzada de la carretera.
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El vínculo entre José Francisco, carnicero de profesión, y los dos agentes de la Guardia Civil no acabó ahí. Tras una situación como la vivida, los dos agentes pertenecientes al puesto de Navas de Riofrío no dejaron pasar la oportunidad de hacer una visita a José Francisco en la carnicería donde trabaja. El vídeo ha sido compartido en sus redes sociales por la Guardia Civil de Segovia.
Los hechos que unieron a José Francisco con Víctor y Alberto ocurrieron el pasado 15 de octubre a primera hora de la mañana, cuando los agentes encontraron el vehículo que conducía José Francisco apartado de la calzada a la altura del kilómetro 8,5 de la carretera autonómica CL-601, en las inmediaciones del término de Palazuelos de Eresma.
Una vez allí, los agentes comprobaron que el conductor «tenía la mano agarrándose el pecho fuertemente, con los ojos cerrados y con gran dificultad para respirar, y se escuchaba un pequeño hilo de respiración ya que posiblemente estaba sufriendo un infarto». En ese momento, los guardias civiles llamaron al servicio de Emergencias 112 Castilla y León y al Centro Operativo de Servicios del Instituto Armado para informar de la situación. A su vez, y viendo la gravedad de la situación, solicitaron un equipo de ambulancia de manera urgente.
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Ana María Criado
Después de hacer la llamada, el hombre entró en parada cardiorrespiratoria, por lo que «los agentes situaron a la persona en el suelo, fuera de la vía, en una zona aislada para mayor seguridad, dado que en la carretera había una gran afluencia de vehículos», revela la información de la Subdelegación del Gobierno. Acto seguido, comprobaron si presentaba signos de vitalidad. Le tomaron el pulso sin éxito y vieron que no tenía respiración. En ese instante, los guardias civiles empezaron a realizarle las maniobras de reanimación cardiorrespiratoria hasta que llegó la ambulancia de soporte vital básico solicitada.
El conductor fue trasladado al Hospital General de Segovia. Dentro del vehículo, el personal procedió a estabilizarle para posteriormente trasladarle al complejo asistencial de referencia en la provincia, al que llegó en torno a las siete y diez de la mañana.
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