Jorge Ruiz | Cantante de Maldita Nerea

«Mis canciones tienen mucha más fuerza que yo»

–¿Qué expectativas tienen para esta noche?

–La Granja es un sitio mágico, nunca mejor dicho. Cualquiera que haya estado sabe que es un lugar especial. Expectativas no tengo, sencillamente quiero estar a la altura, que el concierto tenga una buena entrada y disfrutar de ese rincón especial.

–¿Qué va a poder escuchar el público?

–Nosotros hacemos un recorrido por nuestro repertorio y también incluimos canciones del último disco. Nuestra manera de hacer es intentar que las canciones, después de ser escritas, sean cantadas. Es como yo entiendo que la canción ya no es tuya, sino que el publico la ha hecho suya.

–A principios de año consiguieron llenar el Wizink Center de Madríd ¿cómo afronta la diferencia que hay entre pabellones tan grandes y los conciertos en municipios como La Granja?

–Casi diría que no es una cuestión del recinto sino de las personas que van. Madrid tiene una particularidad. que es que viene mucha gente de fuera. Yo lo diferenciaría por ahí. Pero al final, yo lo que quiero es que canten y me da igual que canten cincuenta. Hombre, es muy espectacular ver a una masa cantando, pero yo intento vivirlos todos de una manera similar porque creo que el que ha ido a una sala también se lo merece.

–¿Qué recuerdo tiene del público segoviano?

–Hace bastante que no voy y espero público de más edad que nuestra audiencia más habitual, que es de 18 a 24 años. También me consta que viene mucha gente de Valladolid o de otras ciudades y mucha gente de la sierra. Entonces creo que se va a parecer más a Madrid, aunque Segovia y Madrid no tienen nada que ver.

–¿Su última gira ha superado sus expectativas?

–Todavía tenemos varios conciertos cerrados pero aún no se han comunicado. La verdad es que ha ido mucho mejor de lo que yo me esperaba. Especialmente 'Inevitable', que es un hito en mi carrera porque me enfoco en el mundo de la educación y la educación en general no es algo que interese. Sin embargo, nos ha dado la vuelta hasta el punto de que cerramos los conciertos con ella. Siempre cerrábamos con 'El secreto de las tortugas' y ahora podemos hacerlo con 'Inevitable' porque la canta todo el mundo.

–Es una canción que canta con su hija ¿cómo se gestionó?

–Pues no fue buscado. Necesitaba una voz infantil y la niña con la que iba a cantar ya es más mayor, así que me la llevé a casa y apareció por ahí Mía. Ella se ha llevado la canción a otra dimensión. Tiene una energía especial y ha llegado mucho más lejos de lo que yo esperaba. En el concurso que hicimos se presentaron 145 colegios, entre 10.000 y 15.000 niños calculamos que han participado en la acción.

–¿Qué tiene de especial 'Manual para seres maravillosos'?

–Es el primer disco donde yo siento que me rompí y me rehice desde otro lugar. Esto para una persona implica que es totalmente nueva. Estás en el mismo cuerpo pero tu visión de las cosas ya ha cambiado. Es un disco que está compuesto desde la entrega, no desde la inspiración. Sin embargo sigue conectando.

–¿Con qué le gustaría que se quedase la gente de este último trabajo?

–Si tuviera que elegir una cosa sería con 'Inevitabe'. Es una canción que habla de la energía más valiosa que posee cualquier ser vivo. El amor es una energía inagotabe, completamente diferente. Entonces si eres capaz de mantener durante toda tu vida tu capacidad de amar, te va a ir bien en la vida.

–¿Hay algo preparado en el estudio a corto plazo?

–Que vayamos a escuchar no, porque yo soy lentito. Pero sí que voy a trabajar para después de verano publicar algo nuevo, sobre todo porque quiero continuar con el desarrollo de canciones para el aula. Me he propuesto hacer cada año una colección de canciones que aporten valor al aula. Creo que es un camino interesante y que me aporta mucho a nivel personal.

–El símbolo del grupo son las tortugas ¿qué tienen de especial?

–Pues es la historia de mi desarrollo personal. Yo tengo una personalidad ansiosa desde niño y me tuve que grabar a fuego el hecho de pararnos. Si corres no te va a ir bien. Ese sería un poco el mensaje. Porque las cosas de valor tardan mucho en hacerse. Yo me lo impuse: «Tú no puedes correr porque no te va bien, no estás hecho para correr». Y funcionó. Siempre lo digo, quiero vivir mucho y vivir bien y eso implica que vayamos despacio.

–Ha dicho varias veces que quiere mantener el anonimato lo máximo posible ¿cree que es realmente posible en la era de las redes sociales?

–Mentiría si dijera que sé cómo se hace, pero de momento lo que sí que puedo contestar es que están mucho más presentes y tienen mucha más fuerza mis canciones que yo. Mientras eso siga pasando y yo tenga la fuerza suficiente para conseguirlo, seguirá siendo así. Eso permite que yo entre andando al Wizink, que es una cosa completamente kafkiana.

–Alguna vez ha comentado que cada vez cuesta más llenar las salas ¿cómo lo lleva?

–Pues he tenido la suerte de encontrar un equipo que lo ha hecho posible. Hemos descubierto la publicidad en Meta y hemos dado con una persona que sabe hacerla y por eso todos los recintos se han llenado. Es el primer Wizink de toda la historia de la música que se llena únicamente con publicidad de Meta. Esto está confirmado por el recinto.

–La mayoría de sus canciones son muy personales, ¿alguna vez siente que se expone demasiado?

–Sí, es uno de los rasgos de esta profesión, que para que funcione tiene que ser verdad. En la poesía, que es un poco mi oficio, el poema tiene que estar vivo, sino no llega. Y para que esté vivo tiene que hablar de vivos y de cómo se sienten. Por eso las canciones requieren que estés expuesto y por eso el escenario es tan duro.