El Ayuntamiento fía a «tres o cuatro años» la solución definitiva para Padre Claret

La alternativa para los trayectos del transporte urbano afectado por el corte de Padre Claret pasa por el desvío por Vía Roma y San Gabriel, donde se han eliminado plazas de aparcamiento para facilitar la maniobrabilidad de los autobuses. En sentido contrario, los vehículos circularán por las calles Soldado Español, Alamillo y Obispo Ondátegui.

El concejal de Obras, Servicios e Infraestructuras, José Luis Horcajo, recuerda que esta nueva 'cirugía' en Padre Claret deriva de «una obras que se hicieron hace un año y medio y que resultaron deficientes». Los hundimientos se han reproducido, con el consiguiente peligro para la calzada y los vehículos que transitan por ella a diario. «Los baches que han salido son importantes», se ratifica el edil en la necesidad de la intervención.

Horcajo califica estas reparaciones de «provisionales». El informe demoledor que encargó el equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Segovia revelaba un cúmulo de fallos y defectos que aconsejan medidas más contundentes que las que ahora se adoptan, que sirven más parchear esos hundimientos más recientes y «evitar daños en los vehículos». Aquel diagnóstico requería actuar «rápido», hace hincapié el concejal.

Así, el Consistorio formalizó un contrato menor para la ejecución de los trabajos, que se prolongará durante dos meses. El edil confía en ganar tiempo para eludir en la medida de lo posible la coincidencia con el inicio del curso escolar. Ese sería el escenario ideal, acabar antes de la vuelta al cole, aunque los plazos de la contratación no lo fijen así. «Depende de lo que se encuentren» durante el desarrollo de las obras, matiza José Luis Horcajo.

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Una vez finalizadas estas mejoras, «habrá que esperar entre tres y cuatro años para ver la evolución y a partir de ahí determinar la solución definitiva» al deterioro que sufre la avenida Padre Claret, avanza el concejal, quien apunta que las medidas que se han ido tomando año tras año no han dado los frutos deseados. Esa intervención, que el edil confía que sea irrevocable, se perfilará a partir de la elaboración de un «estudio muy profundo».