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Parte del terreno arrasado en el término municipal de Navafría por el incendio del pasado 15 de julio. Óscar Costa

Las áreas afectadas por los fuegos de Riaza, Navafría y Honrubia serán zona catastrófica

Particulares y entidades locales que hayan registrado daños podrán beneficiarse de las medidas

Carlos Álvaro

Segovia

Miércoles, 24 de agosto 2022, 07:22

El Consejo de Ministros acordó ayer declarar zona afectada gravemente por emergencias de protección civil –lo que antes se conocía como zona catastrófica– las áreas afectadas por los incendios de Navafría, Honrubia de la Cuesta y Becerril (Riaza), ocurridos a lo largo de un fatídico ... verano para la conservación y protección del medio natural.

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El Gobierno entiende que estos tres grandes incendios ocurridos en territorio segoviano han ocasionado un enorme daño medioambiental y graves desperfectos en infraestructuras y bienes públicos y privados, así como en cultivos y explotaciones, y aunque todavía no han podido ser cuantificados con precisión, la ayuda de la Administración General del Estado es indispensable «para conseguir el pleno restablecimiento de los servicios públicos esenciales y recuperar la normalidad en las zonas afectadas».

LOS TRES INCENDIOS CATASTRÓFICOS

Navafría - Torre Val de San Pedro

Daños materiales muy graves

El fuego se inició el 15 de julio a un kilómetro de Navafría, atravesó la carretera N-110 y llegó a la localidad de Torre Val de San Pedro, que tuvo que ser evacuada. Una vivienda y dos pajares fueron pasto de las llamas. El balance del incendio (declarado nivel 2 en el Plan de Protección Civil) fue demoledor: 893,79 hectáreas arrasadas, entre ellas 755,90 de superficie forestal (arbolada y desarbolada) y 137,89 no forestal (agrícola y otras). Las pérdidas para los afectados fueron cuantiosas, así como elevados gastos que supusieron las tareas de extinción.

Honrubia

La misma pesadilla de 2008

Fue la tarde del 5 de julio. Un incendio de nivel 2 se declaró en término de Honrubia de la Cuesta, aunque acabó alcanzando terrenos situados en otros municipios, como Villaverde de Montejo, Moral de Hornuez o Boceguillas. Rachas de viento de hasta 30 kilómetros por hora agravaron y prolongaron el fuego, que arrasó 150 hectáreas de terreno en el nordeste de la provincia de Segovia. De ellas, 45 hectáreas eran de arbolado, 73 de pasto y 34 de cultivo de cereal. Parte de la superficie calcinada por el fuego también estuvo afectada por el gran incendio de 2008.

Becerril (Riaza)

Todavía sigue latente

Declarado de nivel 1, el incendio que empezó la tarde noche del 13 de agosto en el núcleo riazano de Becerril quedó controlado a las pocas horas, pero, a día de hoy, no ha sido dado por extinguido. Los medios desplazados lograron frenar la cabeza de las llamas y contener su avance hacia Villacorta. Varios vecinos del pequeño núcleo de población, así como turistas que estaban en una casa rural, decidieron salir voluntariamente. Las llamas arrasaron 147,56 hectáreas, un 90% de robledal, un 5% de vegetación de ribera y otro 5% de superficie agrícola y pastos.

El incendio de peores consecuencias fue el ocurrido en Navafría el pasado 15 de julio. El fuego se originó a un kilómetro de la localidad de Navafría y se fue propagando en dirección noroeste. En su evolución atravesó la carretera N-110 y alcanzó el núcleo urbano de Torre Val de San Pedro, cuyos vecinos tuvieron que ser evacuados. Las llamas devoraron una vivienda y dos pajares. El incendio, de nivel 2, no quedó completamente extinguido hasta los primeros días de agosto.

La alcaldesa de Navafría, Jennifer Berzal, recibió ayer con alegría la noticia de la declaración, aunque ayuda no ha faltado desde el momento en que se declaró el incendio. A día de hoy, todavía se desconoce el coste de los daños. «La Junta de Castilla y León nos brindó su ayuda desde el principio, sobre todo para hacer los cerramientos en los montes de utilidad pública. La misma semana del incendio ya teníamos material para hacer el cerramiento e impedir que el ganado accediera a la carretera. Tampoco les ha faltado a los ganaderos paja, forraje y pienso, pues se les está sirviendo todas las semanas. Las llamas quemaron la mitad de la dehesa, que es monte de utilidad pública. Los pastos han bajado, claro, pero la Junta ha abastecido de comida al ganado todas las semanas. Por lo demás, se hizo una relación de daños para conseguir esa declaración de zona catastrófica. Y nos alegramos de que haya sido posible», señala la regidora. Aunque en la relación aprobada por el Ejecutivo figura como incendio de Navafría, la declaración beneficia también a Torre Val. De hecho, fue el municipio que peor parado salió.

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Antes del incendio de Navafría tuvo lugar el de Honrubia de la Cuesta (nivel 2), que también afectó a otros términos municipales, como Villaverde de Montejo, Moral de Hornuez o Boceguillas. Fue la tarde del 5 de julio y costó veintisiete horas sofocarlo por completo. El fuego arrasó 150 hectáreas de terreno. De ellas, 45 eran de arbolado, 73 de pasto y 34 de tierras de cultivo de cereal. Ya en agosto, el pasado 13, la caída de varias torretas eléctricas por el fuerte viento ocasionó un incendio en Becerril, núcleo perteneciente al Ayuntamiento de Riaza, que alcanzó el nivel 1 de riesgo, aunque pudo ser controlado a las pocas horas, que no extinguido. Las llamas arrasaron más de 147 hectáreas de gran valor mediambiental, sobre todo robledal y superficie agrícola y de pasto.

La subdelegada del Gobierno en Segovia, Lirio Martín, señala que la estatal complementa las ayudas que ya está tramitando la Junta de Castilla y León. «La subdelegación se pondrá en contacto con los ayuntamientos para ayudarlos en la tramitación y gestión de las solicitudes. Habrá ayudas para los particulares que han sufrido daños, pero también para las corporaciones locales, por todos las afecciones que puedan haber tenido en sus bienes», señaló. Martín aclaró que la declaración de zona afectada gravemente se extiende a todos los municipios alcanzados por el incendio en cuestión: «Navafría, Honrubia y Riaza es solo la denominación del siniestro».

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El decreto del Gobierno beneficia a quince comunidades, sacudidas por 120 incendios

El 2022 está siendo el peor de la última década. Según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, entre el 1 de enero y el 14 de agosto, el fuego ha arrasado 229.256 hectáreas, cuando la media del decenio es de 57.746, casi cuatro veces veces más. En las quince comunidades autónomas que abarca el decreto aprobado por el Gobierno (todas menos Asturias y Cantabria), se han producido 120 incendios forestales en los que tres personas han perdido la vida y cerca de 27.500 tuvieron que ser evacuadas de sus hogares.

La norma aprobada por el Consejo de Ministros permite activar los mecanismos de ayuda del Estado a las personas y bienes que se han visto afectados por los incendios forestales. Las medidas de recuperación previstas, cuya ejecución corresponde al Ministerio del Interior, prevén ayudas directas por destrucción o daños en la vivienda habitual, en los enseres domésticos de primera necesidad y en elementos comunes de uso general. Los departamentos ministeriales podrán también declarar determinadas zonas de actuación especial, así como la emergencia de las obras necesarias para reparar los daños causados en infraestructuras de titularidad estatal comprendidas en su ámbito de competencias. El real decreto prevé asimismo la concesión de ayudas por daños en producciones agrícolas, ganaderas y forestales, así como beneficios fiscales en los Impuestos sobre Bienes Inmuebles y sobre Actividades Económicas. Los ministerios de Trabajo y Economía Social y de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones podrán desarrollar medidas laborales y de Seguridad Social, como bonificaciones y exenciones de cuotas de Seguridad Social. Por último, las entidades locales recibirán ayudas, por un importe de hasta el 50%, para los proyectos que ejecuten a fin de reparar infraestructuras, instalaciones y equipamientos municipales afectados por el fuego.

En la comunidad autónoma de Castilla y León, se han declarado 40 zonas afectadas gravemente por emergencias de protección civil, 9 en León, 8 en Zamora, 8 en Ávila, 7 en Salamanca, 4 en Burgos, 3 en Segovia y 1 en Valladolid.

Sobre la manera de afrontar los numerosos incendios forestales que se están produciendo en toda España, se pronunció ayer en Segovia el secretario general del Partido Popular de Castilla y León, Francisco Vázquez, que afeó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, su negativa a abordar el problema como una cuestión de Estado. «Tenía que haber cogido el toro por los cuernos porque sobre el Gobierno central recae la coordinación de la política general de los incendios, aunque las competencias sean de las comunidades y las corporaciones locales». Vázquez lamentó que Sánchez no haya dado aún respuesta a la petición realizada por el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, de convocar una conferencia extraordinaria de presidentes autonómicos. «Los incendios son un drama que no entiende de fronteras, de partidos ni de ideologías y, por lo tanto, su luchar tiene que ser una cuestión de Estado», declaró el secretario autonómico de los populares, informa Ical.

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