Los archivos reabren con cita previa y estrictas medidas higiénico-sanitarias

«Nuestro trabajo es eminentemente presencial. No podemos teletrabajar porque nuestra herramienta principal es el material, los documentos, y esos documentos están aquí», explica el director del Archivo Municipal, Rafael Cantalejo, sorprendido por la cantidad de peticiones que se han recibido en los últimos días por parte de las oficinas municipales, especialmente del área de Urbanismo. «Siempre bajan los ordenanzas a recoger los expedientes y trasladarlos a la oficina correspondiente, pero esto ha cambiado con el nuevo funcionamiento. Ahora, lo que hacemos es digitalizar los documentos y enviarlos por correo. El trabajo ha aumentado, claro, porque son muchos planos a digitalizar y no es lo mismo que venga un ordenanza a recogerlos. Sí hemos notado un incremento de actividad en las oficinas de Urbanismo», subraya Cantalejo.

En cuanto a los investigadores, el Archivo Municipal de Segovia ha retomado la atención al cien por cien: «Ha habido varios que se han dirigido a nosotros y nos han pedido un documento concreto. En este caso, lo que hacemos es buscarles el documento en cuestión, digitalizarlo y enviárselo por correo electrónico. En estos últimos días hemos mandado ya media docena de copias de documentos antiguos. Algunos ya los tenemos digitalizados y el proceso es más sencillo». No obstante, los investigadores pueden acudir al archivo a hacer una determinada consulta. «El lunes entró en vigor un protocolo que regirá para todos los archivos. Evidentemente, por seguridad, no podemos admitir a más de dos personas a la vez, pero la sala es grande y se pueden mantener las distancias. Funcionamos con cita previa. Si alguien quiere venir, lo que tiene que hacer es llamar por teléfono y nosotros le daremos una hora. Después, los documentos que se consulten tienen que pasar una cuarentena. Se trata de minimizar riesgos y garantizar la seguridad de los trabajadores del archivo y de los propios investigadores», cuenta Rafael Cantalejo.

Efectivamente, según las órdenes del Ministerio de Sanidad y de la Junta de Castilla y León, los documentos utilizados deben guardan un periodo de cuarentena, diez días según el Ministerio y hasta catorce según la Junta. Esto impide su consulta inmediata por parte de otra persona: «Ese documento no podría volverse a consultar hasta que pase ese tiempo», explica Susana Vilches, archivera bibliotecaria de la Diputación de Segovia. Vilches sigue atendiendo el archivo provincial por vía telemática, pero acude presencialmente siempre que se le requiere. Si el investigador necesita consultar un documento en el archivo debe hacerlo mediante cita previa: «Siempre ha sido así, por otra parte. Tenemos ya dispuestas las medidas que exige el protocolo. Hemos ordenado instalar unas mamparas y hay gel desinfectante. El usuario debe utilizar mascarilla y guantes». Si el documento solicitado se puede digitalizar y enviar por correo, mejor que mejor. «Yo atiendo el archivo presencial y telemáticamente. Estoy a disposición tanto del personal de las distintas oficinas de la Diputación como de los investigadores particulares», añade Vilches.

También está en funcionamiento el Archivo Histórico Provincial, con las medidas higiénico-sanitarias que exigen los protocolos, según confirmó ayer el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Segovia, José Mazarías.