«Hay un serio problema con las mascarillas, no se reciben y cada vez se demandan más»

En la situación de alerta sanitaria, las farmacias son ese servicio esencial que no puede faltar. En la provincia de Salamanca hay 257, 84 de ellas en la capital, a los que hay que añadir los 90 botiquines de varios pueblos. Como actividad esencial ha tenido y tienen «mucho trabajo, y también muchas circulares» para adaptarse a la situación, señala Carlos A. García Pérez-Teijón, presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Salamanca. También por la «preocupación en la población, primero por los geles hidroalcóholicos, luego por los guantes y después por las mascarillas», lo que ha ocasionado que hubiese desabastecimiento.

En los geles lo hubo al principio, pero «se recuperó el abastecimiento», sin embargo, «sigue habiendo problemas para conseguir guantes, porque vienen a golpes y desaparecen enseguida de las farmacias; la gente los quiere, los necesita y los utiliza, ya que están concienciados de mantener con rigor sanitario lo que se les indica en higiene, distancia, etc». En cuanto a las mascarillas, «hay un problema serio, porque no se reciben y cada vez las demandan más». Sí que reciben alguna quirúrgica, pero pocas y «son para un uso de varias horas». Las FP1, añade, «no suelen llegar, las FP2 menos y las FP3 son muy escasas. De momento hay serios problemas para conseguir la mascarillas, aunque puede que en dos semanas comiencen a llegar, pero en estos momentos hay problemas de abastecimiento».

En cuanto a fármacos, «no hay desabastecimiento para las patologías habituales y crónicas», afirma Carlos García. Con algunos medicamentos» se han establecido protocolos estrictos desde la Agencia Española del Medicamento, las comunidades y las farmacias para que a los pacientes habituales se les pueda seguir dispensando, pero solamente a ese tipo de pacientes».

También ha aumentado el número de clientes que va a buscar fármacos, como el paracetamol o el ibuprofeno. En este sentido, señala otra de las medidas tomadas, como es que «se ha permitido dispensar sin receta concentraciones de dosis más altas». Existe un incremento de la demanda, «pero no hay rotura de stock y se puede atender».

En ese incremento de la compra de medicación también tiene que ver que se «ha duplicado la receta electrónica para que no tengan que volver con tanta frecuencia a la farmacia y tienen medicación para dos meses». Además, añade, que «se ha incluido a muchos pacientes también que no estaban en receta electrónica», al igual que «más visados de los que estaban permitidos antes».

En cuanto a las medidas de protección en las farmacias de farmacéuticos y trabajadores, comenta, que en su caso, tienen guantes porque «cuando nos llegan, apartamos un número determinado, pero si tardan en llegar, también nos quedaremos sin ellos». En los establecimientos se han tomado medidas como las pantallas protectoras o la distancia de seguridad, mediante carteles, etc., que los clientes «sí suelen respetar».

El presidente de los farmacéuticos salmantinos señala que cuentan con máscaras faciales proporcionadas por la USAL que se repartieron entre los colegiados y que la empresa Plásticos Durex también les donó más de 250. También han realizado convenios con Cruz Roja y Cáritas para poder prestar atención domiciliaria a personas mayores.

«Se han ido implementando muchas medidas para mejorar la situación», afirma Carlos García, que pide que «se cuente con la farmacia; somos un sanitario más volcado en sumar en esta situación crítica». En este sentido, comenta que las 22.071 farmacias de España se han ofrecido a las autoridades sanitarias para «hacer el reparto de las mascarillas que el Gobierno está dispuesto a ofrecer a los ciudadanos; simplemente sería con la receta electrónica de cada paciente».

La covid-19 ha afectado a algunos farmacéuticos y trabajadores, que se encuentran en cuarentena, pero en las farmacias hay «establecidos turnos para intentar no cerrar». Los horarios se mantienen, con un mínimo obligatorio de 9:30 a 14 horas y de 17 a 20:30 horas, así como los mismos turnos de guardia.