«No entendemos, y ahora menos, que no se escuche al alumnado, al profesorado y a las familias»

«No entendemos nunca, y ahora menos, que la autoridades educativas no escuchen al alumnado, al profesorado y a las familias, que son los que están trabajando y manejando todo esto día a día», afirma Soledad Alegre. Y en este momento de confinamiento, «las administraciones jamás se han puesto en contacto con las familias» y «estamos siendo imprescindibles», ya que «por ejemplo, un niño de 6 años no es autónomo para seguir su trabajo del colegio y un adolescente de 13 años, tampoco y necesita ayuda de la familia para organizar el día». Están «siendo imprescindibles», pero no solo en el tema educativo, ya que «a la vez hay familias que gestionan su trabajo, telemático o no, situaciones económicas al límite y también de enfermedad o muerte».

Tampoco, señala, «se escucha» a los profesores, ya que la Consejería de Educación «no ha trabajado con los sindicatos» las instrucciones, «simplemente se les dio el documento cerrado».

«Si no escuchamos a la comunidad educativa, por qué luego se nos llega la boca poniendo esas instrucciones y que se va a cuidar el bienestar de toda la comunidad educativa. Al final, es un poco descorazonador».

«Parece que nadie se quiere mojar, porque cualquier decisión va a tener repercusiones que afectan a muchos ámbitos», continúa Alegre, que insiste en que «es ahora cuando la Administración tiene que tomar esas decisiones» y «no decir cosas de manera difusa, confusa y sin concretar. La Consejería podría haber dicho la evaluación se hace así, así y así». Si al final se puede volver al aula, «volvemos y se sacarán las instrucciones que se tengan que sacar en ese momento; pero ahora desde el minuto uno del tercer trimestre tú sabes que tienes que trabajar de una forma concreta».

«No quieren dar pautas concretas que los puedan dejar en evidencia», porque «por mejor que se quiera hacer, seguirá siendo una situación injusta y extraordinaria», pero «esta generalidad afecta a todo el mundo», concluye.