Pezzolano: «No me dice nada estar colíder, como no me lo decía estar sexto»

El rostro de Paulo Pezzolano en rueda de prensa tras la importante victoria ante la SD Huesca es el mismo que el día del empate ante el Levante en Zorrilla, que el de la derrota en Andorra, que el del empate ante el Albacete... Los mismos gestos, las mismas palabras... Quizá hasta el mismo discurso.

«¿Le dirá algo que el equipo se sitúe colíder?», le espetó Manuel Belver, del Día de Valladolid al técnico, que impasible contestó: «No me dice nada el coliderato, como tampoco me lo decía cuando estábamos sextos, séptimos o cuartos», contestó en un primer momento.

Se tuvo que ahondar un poco más en la coraza del preparador uruguayo –por otro lado lógica, tras una temporada de casco y antibalas– para sacar algo más de «lo importante es el partido de la próxima semana ante un rival muy duro». Tuvo que ser apelando a lo anímico cuando el entrenador sudamericano valoró que el equipo no es que esté en su mejor momento... «Es que teníamos una plantilla totalmente nueva, y los chicos cada vez se conocen más. Eso es importante. A mediados de la temporada también vinieron cinco o seis chicos nuevos, y también han tenido que ir adaptándose», defendió el entrenador blanquivioleta, con un argumento válido con respecto al porqué del gran rendimiento del equipo en el último mes, y que coincide por ejemplo con el hecho de que repitiera once, un a 'rara avis' del ex del Cruzeiro en Valladolid. También esta explicación coincide con la titularidad de Lucas Oliveira; o la llegada de César Tárrega, dos de esos jugadores que ahora mismo parecen intocables para el míster sobre el campo.

Y en ellos dos también viene la explicación –en parte– del rendimiento defensivo. Casi seis partidos sin encajar un gol. Desde aquel minuto 2 del choque ante el Eibar, hace más de un mes. «El mérito es de los chicos, pero no sólo de la defensa. Es del equipo entero, que está haciendo un gran trabajo, con la presión, el bloque medio y la defensa. Eso nos permitió que el equipo rival no tuviese chances. La lástima es que no pudiésemos ampliar el resultado», agregó al tiempo que incidió en que la defensa comenzó «desde Negredo y Marcos André».

El trabajo defensivo «y la atención a los detalles cuando había que jugar a defender», fue fudamental para Pezzolano en tres puntos «importantísimos». «Supimos jugar a lo que había que jugar en cada momento, y la pena es que no pudiésemos haber convertido alguna otra ocasión, con algún error en alguna transición», señaló el preparador blanquivioleta, que tras abrir mínimamente el 'chaleco', regresó «al importante partido próximo», y «traer los tres puntos acá».

Por su parte, el técnico de la SD Huesca, Antonio Hidalgo, lamentó la falta de contundencia de su equipo en los metros finales en Zorrilla, y el arranque de sus jugadores, que no supieron frenar al Real Valladolid en la primera parte.

«Con el paso de los minutos y sobre todo en la segunda mitad hemos ido cogiendo el tempo al partido, pero nos ha faltado conectar ese último pase», afirmó el preparador azulgrana que, aún así, puso en valor el partido hecho por sus futbolistas «ante un gran rival». «Les hemos puesto en apuros sobre todo en la segunda mitad, pero nos ha faltado ese último pase. Han terminado pidiendo la hora... Y lo ha hecho un equipo en el que hacen los cambios y lo meten todo...», concluyó el preparador oscense en relación a la profundidad de banquillo del Real Valladolid.

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