La intrahistoria del despido de Fran Sánchez del Real Valladolid

La previsión es que el Real Valladolid pueda ejecutar este verano traspasos de jugadores por un valor de unos 30 millones de euros, una cifra inusual ahora mismo en el mercado futbolístico español. Gonzalo Plata fue vendido por 12 millones al Al-Sadd (el club se embolsará la mitad, más incentivos), Cyle Larin va a salir por una cantidad en torno a los 8-9 millones (incluye variables) y la operación de Iván Fresneda se cifra en 10 millones de euros. Además, Sánchez había dejado varias operaciones muy encarriladas y a falta de la firma final, como la vuelta del delantero Marcos André desde el Valencia o la del extremo izquierdo-delantero Estanis Pedrola desde el Barça Atlétic. El club se encuentra ahora cerrando esos traspasos, ya sin Fran Sánchez en la dirección deportiva y a la espera de concretar la llegada de Domingo Catoira, que ya formó parte del Real Valladolid como 'número dos' de Braulio Vázquez, entre julio de 2014 y marzo de 2017, dos meses antes de la salida de Vázquez. Catoira ocupó el puesto de director deportivo del RCD Espanyol el pasado curso y fue destituido tras el descenso del club perico a Segunda División. Al Real Valladolid puede llegar acompañado de Hugo Blanco, que fue director del Área de Identidad del Espanyol entre 2020 y 2023.

La decisión de prescindir de Fran Sánchez a poco más de una semana de que comience la competición se basa en el argumento de recuperar la ilusión entre la hinchada, en una campaña en la que se acaba de batir el récord de abonados en Segunda División. Cuando el Real Valladolid fichó a Fran Sánchez en el verano de 2021, tras el descenso a Segunda, lo hizo con la vitola de su gran éxito en el Granada, club al que llegó en 2017 como gerente, llevó a Primera División en 2019, logró su consolidación en la élite el curso siguiente y alcanzó los cuartos de final en la Europa League en la campaña 2020-2021. El club blanquivioleta quería repetir ese modelo y pareció encarrilarlo cuando logró subir a Primera División de la mano de José Rojo 'Pacheta' en el banquillo y Fran Sánchez en la dirección deportiva. Sin embargo, el nuevo descenso a la categoría de plata, con la derrota ante el Valencia de la jornada trigésima primera como punto de inflexión (ya con Paulo Pezzolano en el banquillo), acabó dando al traste con estos planes. Una plantilla confeccionada para seguir en Primera y soñar (como hizo el Granada) con Europa a corto-medio plazo se vio en Segunda División.

Desde las oficinas de Zorrilla se señala ahora que «las cosas no paran» tras el despido de Fran Sánchez, que se están «cerrando operaciones de jugadores» y que «el nuevo director deportivo será anunciado en breve», sin ofrecer un plazo concreto.

Durante las últimas semanas, la actividad de Sánchez había resultado frenética, pero ya se atisbaban signos de desgaste entre las dos partes y el Real Valladolid decidió su despido en un momento que ha sorprendido a agentes, futbolistas a punto de firmar, y a los propios jugadores del Real Valladolid.

Durante la tarde-noche del lunes se sucedieron los mensajes de WhatsApp y las llamadas para ver qué había sucedido tras el fulgurante despido de Fran Sánchez. El ya ex director deportivo había estado negociando sólo unas horas antes el traspaso de Iván Fresneda al Barcelona por 10 millones, así como la incorporación de Estanis Pedrola desde el club azulgrana. Sin embargo, las últimas semanas habían resultado duras y se atisbaban síntomas de desgaste entre la directiva y la dirección deportiva. El papel de Paulo André, nunca aclarado del todo dentro de la estructura blanquivioleta, también ha tenido importancia en este proceso. La idea de recuperar la ilusión entre la afición tras un mercado en el que sólo han llegado hasta la fecha los refuerzos de Enzo Boyomo, Raúl Moro y César de la Hoz es el argumento esgrimido por el club tras el despido de Fran Sánchez. Con un mes por delante para fichar, el Real Valladolid busca romper el desánimo que percibe en la afición con una cara nueva en la dirección deportiva. La buena relación que mantiene Domingo Catoira con Paulo André apunta en este sentido. Habrá que ver qué sucede ahora con las operaciones en curso y si el lavado de cara en los despachos a pocos días de iniciar la competición en Segunda División ofrece los resultados esperados. Ahora mismo, el club vive tiempos convulsos.