
De desaparecido en el mapa a Primera División
Corazón blanquivioleta ·
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Corazón blanquivioleta ·
Roberto Corral, que tuvo que emigrar a Polonia después de desvincularse del Real Valladolid, ha encontrado la felicidad en el Korona KielceHace menos de un año, Roberto Corral vivió uno de los momentos más duros de su carrera deportiva. En el último día del mercado estival, el Real Valladolid anunció la desvinculación del lateral izquierdo. El canterano llegó en categoría benjamin en la temporada 2007-08 y fue escalando peldaños hasta debutar con el primer equipo en Copa del Rey. Fueron 14 bonitos años defendiendo la elástica blanquivioleta. El Real Valladolid, sin embargo, se encontró con una extensa plantilla que tenía que reducir. Corral fue uno de los tantos que se vio obligado a buscar un nuevo destino. «Era difícil encontrar equipo porque las plantillas estaban cerradas y te entra ansiedad. Por suerte el club se comportó genial conmigo y me dejó entrenar con el Promesas hasta que pude salir». Durante esos cuatro meses de incertidumbre, se le pasó por la cabeza dejar el fútbol para empezar a trabajar como fisioterapeuta. Fran Sánchez le dio la posibilidad de trabajar en el club en el caso de que no encontrara un nuevo equipo, pero el vallisoletano de 24 años decidió luchar. «Sabía que tenía mucho que dar. A veces los futbolistas vivimos en una burbuja y no valoramos lo que es el fútbol».
El aura positiva le brindó una oportunidad en enero. Su representante le ofreció al Korona Kielce de la Liga 1, Segunda División polaca. Pacheta, con quien tenía una buena relación, había dirigido al conjunto polaco en la temporada 2013-14. El técnico burgalés se puso en contacto con el director deportivo del Korona Kielce para informar de las cualidades del jugador. «La opinión fue positiva y el club me dijo que me incorporara el 10 de enero a entrenar». Junto a su hermano viajó a Polonia en su primera experiencia fuera de España. Reconoce que las dos semanas que estuvo a prueba fueron «muy duras». «La preparación física es muy distinta. En España se da importancia a las posesiones largas. Aquí trabajamos los contraataques y el ritmo es muy alto, todo ello con una temperatura bajo cero».
Durante ese breve periodo de prueba, Leszek Ojrzynski, entrenador del Korona Kielce, le comunicó que quería verle en el primer amistoso. En aquel encuentro ante el Puszcza Niepolomice tuvo buenas sensaciones. Su buen hacer sedujo al preparador polaco quien anunció en rueda que el excanterano blanquivioleta iba a permanecer en la primera plantilla hasta final de temporada.
Corral se instaló en un país con una cultura y lenguaje diferente. Le costó adaptarse, pero no tardó en aprender polaco y así aclimatarse al país que le había tendido la mano. «A mis compañeros les gustó mucho, me he sentido como en casa». Y en el ámbito deportivo, el lateral zurdo ha contado con la continuidad que tanto anhelaba. Desde que llegó ha sido titular en 12 de los 15 encuentros ligueros. «Sabía que este entrenador iba a contar conmigo, por eso apostó por mí».
Sin duda, el aliento y fervor de la afición es uno de los aspectos que más le impactaron. «Van con bengalas, quieren hacer ruido para que se note su presencia. Después de cada partido les damos las gracias por sentir su apoyo. Nos unimos a los cánticos, yo al principio no les entendía, pero ahora ya sí», bromea, a lo que añade que en ocasiones, jugadores y afición se reúnen en el bosque «para sentir su presencia y apoyo».
Después de una temporada de altibajos, su equipo logró clasificarse para los 'play-off de ascenso. Tras doblegar al Odra Opole, se plantó en la gran final para enfrentarse al Chrobry Glogow. Tuvo que ser en la prórroga cuando se resolvió la eliminatoria. «Con el pitido final hubo una avalancha de aficionados que invadieron el campo. Nunca había vivido algo así. Pasé de estar desaparecido en el mapa a lograr un ascenso a Primera División».
Esa hazaña le hace recordar tiempos pasados. Guarda la espinita de no haber debutado en Primera División con el Real Valladolid. Tuvo la oportunidad de hacerlo en la temporada 2019-20 ante Leganés y Osasuna. «Nacho estaba lesionado y Fede Barba se fue en el mercado invernal. Estuve entrenando toda la semana con el primer equipo, pero Sergio (González) decidió poner a un lateral derecho en el costado izquierdo. Sabes que tienes la oportunidad, pero no te la quisieron dar», relata Corral, quien dice que no guarda ningún rencor y asevera que si tuviera la oportunidad de volver al club blanquivioleta no dudaría. «Es mi casa, mi ciudad y mi único equipo».
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Antonio G. Encinas | Valladolid y Francisco González
Lucía Palacios | Madrid
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