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El partido que debe enfrentar esta noche a las 21:30 a Cádiz y Real Valladolid se jugará finalmente, una vez que las pruebas PCR han dejado claro que solo hay un positivo por la covid-19 en el equipo andaluz. El lunes, Álvaro Cerevera dejó caer que no sabía de cuántos futbolistas iba a disponer, lo que supuso que se pusiera en entredicho la celebración del partido.
... En el Real Valladolid nunca se tomaron muy en serio esa posibilidad y el equipo ha viajado en avión esta mañana a Jerez de la Frontera, desde donde se ha desplazado hasta la Tacita de Plata. Sergio viaja con todos los disponibles, así que en Valladolid se han quedado Marcos André, Joaquín, Janko y Kiko Olivas, dispuesto a deshacer el mal fario que le persigue en el Carranza, estadio en el que jamás ha vencido en Primera Divisió.
El encuentro es vital para los pucelanos, frente a un rival en crisis que empeiza a tomar conciencia de que su liga es la que le mide a los de abajo, y no a los de arriba como hasta ahora. Y Sergio advierte de que si los suyos no igualan la intensidad de los gaditanos, tendrán poro que hacer.
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