Bruno Mazziotti apunta a seguir en el Real Valladolid

Mazziotti, que finaliza contrato la próxima semana, y que llegó a Zorrilla como una de las figuras de confianza de Ronaldo Nazário en la primavera de 2024, entiende que su labor «no ha terminado» en Valladolid, y todo apunta a que seguirá con la nueva propiedad, dado el trabajo realizado en las últimas semanas, en las que se ha encargo de facilitar informes y negociaciones a Gabriel Solares y su equipo del Grupo Ignite.

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El brasileño, que de quedarse no desempeñará el cargo de gerente global con el que aterrizó en Valladolid en esta segunda etapa, sí mantendrá esa capacidad de trabajo en la gestión deportiva, algo que alaban sus propios compañeros esta temporada. «Es una persona de equipo», reconocen desde las oficinas para definir a Mazziotti, del que creen que podría hacer buen tándem con Víctor Orta.

El propio Bruno valora la figura de Orta «con ilusión». «Hace falta gente ilusionada con estar aquí. Hay que darle la vuelta al vestuario», reconoce al tiempo que habla de esa «limpieza» que hay que hacer en la plantilla para empezar de cero con un proyecto «ilusionante».

Mazziotti reconoce que la dirección deportiva, que lidera todavía Domingo Catoira –hasta el 30 de junio–, ya había realizado un casting de técnicos, incluso había realizado entrevistas con algunos de ellos, entre los que estaba el propio Antonio Hidalgo, recientemente fichado por el Deportivo de la Coruña.

Sin embargo, es la nueva propiedad –y previsiblemente Víctor Orta–, la encargada en este momento de mover ficha en este sentido con nombres como los de Luis García Plaza, Luis Carrión y Borja Jiménez sobre la mesa. En este sentido, se busca preferentemente un entrenador con experiencia en Segunda División.

La apuesta de Bruno Mazziotti por seguir se antoja «como un reto personal» por lo vivido en la última temporada, y no haber sido capaz de «limpiar» un vestuario viciado.

Para el italo-brasileño de 47 años, con una amplia trayectoria en las selecciones absolutas de Brasil y Uruguay y en el Corinthians, Arsenal o PSG, el cambio de propiedad es también «una oportunidad» para darle la vuelta al calcetín y dotar de identidad propia al Real Valladolid tras el batacazo de la pasada campaña.

El cambio de estatus se viviría como una tercera etapa de Mazziotti en Zorrilla, después de llegar por primera vez a la entidad blanquivioleta en la temporada 2021-2022 como responsable del área de Salud y Rendimiento, en aquel Real Valladolid de Pacheta. Posteriormente, salió y regresó ya como uno de los hombres fuertes de Ronaldo en la primavera de 2024. Entonces, llegó con el estatus de gerente global, y «siempre de la mano de la dirección deportiva encabezada por Domingo Catoira», rezaba entonces el comunicado de su presentación. «Se convertirá en el nexo entre presidencia, los directores de área, cuerpo técnico y jugadores, con el objetivo de garantizar la visión estratégica global en el día a día», un trabajo que se le ha visto desempeñar a diario en los entrenamientos o en los desplazamientos del equipo.

Mazziotti llegó para estar «exclusivamente centrado en el día a día del Pucela», y sustituir a un Paulo André al que se le dio una mayor presencia en el Cruzeiro antes de la venta.