Domingo de quesos y urnas en Frómista

A las 11 horas arrancaba oficialmente la feria con todos los 'stands' y ocupaba toda la avenida dispuesta para ello. Los primeros curiosos se acercaban desde ese momento, algunos incluso tras pasar por las urnas. «Hemos votado antes de venir porque así nos lo quitábamos de encima. Normalmente votamos por la tarde, pero este año hemos aprovechado pronto, también es verdad que son unas elecciones diferentes por las fechas», comenta Vicente Ramos. El punto solidario también estaba presente en Frómista, con un pequeño puesto con un mercadillo solidario de libros en el centro de la feria. A la par, se promovió una exposición de pintura y la entrega de premios del concurso de pintura infantil/juvenil al aire libre Santiago. Una actividad más que se sumó a una jornada polifacética y con diferentes opciones y que culminó con el tradicional sorteo de lotes de productos donados por los expositores.

Los principales protagonistas a la hora de votar fueron los propios propietarios de los expositores, que con un horario tan amplio de feria no contaban con demasiadas opciones. Los vendedores locales contaban a su favor con un colegio electoral a la vuelta de la esquina, una comodidad que no estaba al alcance de todos. «Aquí se puede ir a votar porque está todo cerca en el pueblo y los que viven en Frómista, pero son de los pueblos de alrededor pueden ir a votar y pasarse luego por aquí. No creo que perjudiquen tanto las elecciones a la feria, aunque es verdad que no estamos teniendo tanta gente. Quizá la gente de fuera es la que no se ha movido por este tema y por eso estamos echando en falta algo más de clientes», recalca Javier Gutiérrez.

Los vendedores de los 'stands' de productos llegados desde Valladolid o Extremadura se vieron obligados a optar por otras alternativas, con el voto por correo como la opción favorita por la mayoría de ellos. «He votado por correo y con bastante antelación porque sabíamos las fechas de las ferias, entonces no hemos hecho colas ni nada de eso. En las municipales nos pasó lo mismo y no hemos tenido ningún problema», afirma Víctor Serra, de Extremadura.

La cercanía con los diferentes lugares de procedencia de los vendedores abría otras alternativas diferentes, sobre todo para los censados en la provincia de Valladolid. «Nosotros vamos a votar aprovechando el descanso que hacemos a la hora de comer. Somos de un pueblo de Valladolid, entonces no estamos demasiado lejos, a unos 40 minutos. Vamos a ir a comer allí, aprovechamos para votar y volveremos para estar aquí en el puesto por la tarde. Si se hubiesen abierto las mesas un poco antes, nos hubiese venido fenomenal, pero según estaban las cosas, era la única opción que teníamos», apunta Miguel Yáñez. Una jornada peculiar para todos los vendedores, con incluso alguno de los fromisteños apostando por el voto por correo, a pesar de contar con la posibilidad de aprovechar cualquier momento para hacerlo en el mismo colegio electoral a tiro de piedra. «Yo he votado por correo porque sabía que nos coincidía con la fecha de la feria y prefería evitarme problemas. He preferido dejar los deberes hechos», agrega Alberto Gutiérrez.

Una Feria del Queso que no cambió especialmente los planes de los fromisteños, pero sí los de los propietarios de los 'stands'. Coincidir con las elecciones generales hizo que llegaran menos visitantes. «Estamos teniendo menos gente respecto al año pasado. Creo que las elecciones han podido afectar mucho a la afluencia de gente porque son algo nuevo en estas fechas, nunca se había votado en verano», comenta Susana Pérez.

El intenso calor fue otro de los importantes condicionantes que pudo acabar con las ganas de muchos visitantes o curiosos que en otras ocasiones se han acercado a Frómista, pese a que todas las miradas se centraban de forma particular en las urnas.