La 'siembra' de Vox avanza igual en pueblos y capitales

Unos apoyos que el partido de derecha radical ha logrado consolidar de manera muy homogénea por los 94.000 kilómetros de Castilla y León. Santiago Abascal presumía en la noche electoral de que habían hecho una campaña «magnífica en la que hemos recorrido cada pueblo, cada barrio y hasta cada polígono».

La táctica, que casi siempre incluyó el 'desembarco' de algún peso pesado de la formación, ha dado sus frutos. Es la 'Siembra' de su lema sobre fondo rural y verde.

Hoy pueden presumir de que solo han 'pinchado' en Soria, precisamente la provincia que más ha visto alterado su reparto de voto con la gran irrupción de la plataforma Soria ¡Ya! En esta provincia, la que menos procuradores reparte (5), Vox logró un insuficiente 11,47%, que le deja sin representación en la tierra donde arrancaron los primeros gritos de la España vaciada. Es la única de las nueve provincias en la que no tendrá representante.

En el resto, ha dado igual la diversidad leonesista o el centralismo vallisoletano. En todas ha logrado porcentajes entre el 15% y el 20% del total.

De hecho, el tropezón soriano ha quedado largamente compensado con el 'zarpazo' que dan en Valladolid. La provincia que reparte más asientos en el Parlamento de Castilla y León (15) es donde han logrado su mejor resultado, con un 20% de los sufragios y tres escaños.

Segovia, con el 19,42%, Zamora (19%), Salamanca y Palencia (18%), Ávila (17,44%), la provincia del candidato García-Gallardo, Burgos (16,57%) y León (15,38%) completan el mapa provincial de su fuerza.

Si buscamos en el gran mapa de la Meseta los lugares donde el color verde de Vox, ha sido mayoritario podría dar una imagen falsa de su verdadero empuje. Solo ha sido el partido más votado en 80 ayuntamientos de los 2.248 de Castilla y León. Apenas uno de cada 28 núcleos de población.

Entre ellos, destacan hasta ocho pequeñas localidades en las que más de la mitad de sus votantes han apostado por ellos, como son la vallisoletana Villán de Tordesillas (53,3%) y Torrubia de Soria (52,4%).

Pero todavía no ha logrado dar el 'sorpaso' en grandes núcleos. El mayor de todos en el que se ha impuesto es Boecillo (Valladolid), de poco más de 4.000 habitantes. Pero, ha sido la formación más votada del espectro conservador (por delante del PP) en otros 140 municipios. Y en más de 250 ha superado a los socialistas.

En las capitales de provincia, Vox ha tenido un rendimiento similar que en el conjunto de las circunscripción, aunque en algunos casos un poco por debajo.

De hecho, excepto en las ciudades de León y Burgos, en el resto ha tenido porcentajes de voto inferiores al de las respectivas provincias. En León se queda en cuarta posición y roza los 10.000 votos, pero todavía es un 50% menos que el PP y lejos de los autonomistas de Unión del Pueblo Leonés, que casi les doblan. Aunque es llamativo su avance en Villaquilambre, pueblo dormitorio de la capital con casi 20.000 habitantes y en la que reside el líder del PSOE regional, Luis Tudanca. Allí son ya la tercera fuerza tras superar al PP. Y de los socialistas se han quedado a 600 votos.

En los núcleos urbanos burgaleses aguantan la medalla de 'bronce' (Aranda de Duero y Burgos) salvo en Miranda de Ebro, único gran núcleo de toda la región en la que se ven superados por Unidas Podemos.

En cualquier caso, en todas se mueve de nuevo entre el 15% y el 20% de los votos, excepto en Soria capital, donde se queda en el 8,9%. Vox logra su mayor porcentaje entre las capitales en Zamora, con un 18,5% de los votos de la circunscripción. En Ávila, Soria y Segovia, no ha pasado aún de la cuarta posición.

Así se ha repartido el apoyo a la formación de Juan García-Gallardo

En Valladolid, la provincia más generosa en escaños, Vox ha ganado en 15 municipios. La capital es su mayor granero con más de 28.000 votantes (17,8%), aunque aún lejos de PSOE y PP.

Pero, como pasa en el alfoz de León, es muy llamativo su avance en Arroyo de la Encomienda, (20.000 habitantes) donde ya son la segunda fuerza tras superar al PSOE y a menos de cien votos del PP. En otros pueblos grandes como Tordesillas, Simancas o Cigales (los tres con más de 5.000 habitantes), el partido de Abascal ya se ha intercalado entre PP y PSOE.

Por su carga simbólica, entre los municipios en los que el partido ultraconservador se ha convertido en el más votado destacan dos ubicados en Valladolid. Con sus 4.000 habitantes, Boecillo es ya el mayor feudo en sus manos. Sus 600 votos exactos dieron a Vox el 28,3% de los votos, superando al Partido Popular por 16 sufragios (27,5%) y al PSOE 503 (23,7%).

Con sus más de 35.000 euros de renta media individual, Boecillo es el segundo municipio más rico de Castilla y León, solo superado por el cercano Simancas (donde Vox también superan al PSOE y se acerca al partido de Mañueco).

En el análisis de esos 600 votos por las mesas electorales de esta localidad de alto nivel (sede del Parque Tecnológico de Castilla y León), destaca el dominio creciente del partido que lidera en la región Juan García-Gallardo en las lujosas zonas residenciales del extrarradio y cercanas al citado parque. En el núcleo central del pueblo, cerca de donde estuvo en su tiempo el único Casino de Castilla y León, el PP todavía mantiene el pulso, aunque con distancia menguante.

Y aún mayor cariz simbólico puede encontrarse en Fuensaldaña. Su castillo fue sede de las Cortes regionales de Castilla y León durante 23 años hasta que que en noviembre de 2007 y después de muchos años de retraso e incumplimientos de la Ley de Sedes de la Comunidad, se inauguró el 'cubo' situado en Villa del Prado en Valladolid. Una fiesta que presidieron los hoy reyes eméritos, Juan Carlos I y Sofia.

En esta localidad de unos 1.700 habitantes, Vox se impuso el domingo con el 28,8% de las papeletas (303), con relativa ventaja sobre los socialistas (267 votos, 25, 3%) y el Partido Popular (265, 25,1%).