El clamor de los barrios que se vacían en Valladolid

«Estos barrios (pero también otros como La Rondilla o Pajarillos) tienen un parque de viviendas antiguas, obsoletas, sin garajes ni ascensores, con problemas de superficie», enumera Jesús Valverde, quien reclama un programa de rehabilitación urbana y residencial, con ayudas del Ayuntamiento, que contribuya a renovar estos pisos y convertirlos en atractivos para la población joven. En esta línea, recuerda que el colectivo vecinal solicitas, desde hace quince años, el derribo del cuartel abandonado de la Guardia Civil y la construcción allí de vivienda joven. Ese envejecimiento (uno de cada tres vecinos tiene más de 65 años, hay casi 2.500 habitantes con más de 80) provoca un creciente número de mayores que viven solos. Por eso, desde la asociación Vicente Escudero proponen un equipo de asistentes sociales que trabaje «a pie de calle», que más allá del despacho «recorra los barrios para localizar y atender a las personas mayores sin compañía». Entre sus propuestas, se encuentra también la reforma de las plazas de San Juan y Vadillos, que llevan 40 y 35 años sin un lavado de cara. «Son zonas de paso y no espacios estanciales, que es lo que necesita el barrio», dice Valverde. El colectivo incluso plantea la posibilidad de peatonalizar calles como Santa Lucía, Bautismo o Jardines. El listado de peticiones se completa con la revisión de los árboles en mal estado de Vadillos y la plaza Circular, el combate contra las ratas en el Esgueva o políticas sociales que favorezcan la integración de los nuevos vecinos (el 10,83% es población extranjera).

El trabajo en red, desde un punto de vista cultural, es reivindicado por Vanesa Calzada, de la galería La Fontanería Crea, un espacio creativo que aprovecha las instalaciones de un antiguo comercio vinculado con la construcción. «Hace tiempo que creo que falta comunicación entre los espacios que dinamizan el barrio. Aquí hay galerías, escuelas de música y de diseño, muchas asociaciones y fundaciones que podrían trabajar en red para dinamizar estos barrios», dice Calzada, quien apuesta por un nombre, «proyecto Constelaciones», para bautizar esta colaboración deseada «que sería muy beneficiosa para mostrar todo lo que hacemos en el barrio».

Isabel González y Teresa Cordero son las copropietarias del Puerto Chico, uno de los locales hosteleros más activos de la zona. Allí, dicen, pelean contra el olvido de las administraciones. «Al final, todo se hace en el centro: las fiestas, el Teatro de Calle, las actividades de San Pedro Regalado, Navidad... La promoción del Ayuntamiento debería recordar que los barrios existimos, que la hostelería no es solo el centro y que tenemos un papel muy importante en los barrios. Si el comercio y la hostelería cierran, los barrios se mueren», cuentan Isabel y Teresa, quienes proponen una remodelación de la plaza de San Juan y una campaña de difusión de la Casa Museo de Colón. «Es un atractivo del barrio que no es muy conocido», cuentan.

-Reclamación del uso del viejo cuartel de Vadillos como vivienda joven.

-Reforma de la plaza de San Juan

-Nuevo paso peaotnal entre las calle Vía y Salud.

-Reforma de los pasos rodados y peatonal de San Isidro.

-Programa de aparcamientos públicos en la zona de la plaza de San Juan.

-Impulso a la economía de los barrios con subvenciones a proyectos de comercio local de proximidad

-Seguir impulsando la utilización desde el Ayuntamiento del antiguo cuartel de Vadillos para dotaciones y viviendas públicas

-Medidas para evitar la brecha digital y que las personas mayores tengan fácil acceso a las nuevas tecnologías, gestiones etc

-Reurbanización de la plaza de Vadillos, permeabilización de la de San Juan y ampliación del parque infantil.

-Ampliación de aceras en la calle Reyes.

-Aumento dle parque público de vivienda para alquiler social en esta zona.

-Promover la ampliación del centro de salud Pilarica-Circular.

-No hay facilitado sus propuestas para estas zonas.