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Veintiún clubes de la provincia han remitido un escrito a la Federación de Castilla y León de Fútbol reclamando una solución a la falta de árbitros que vienen sufriendo semana tras semana, y que ha llevado a la suspensión de una serie de partidos. Los firmantes no solo rechazan la opción planteada desde el organismo federativo de incentivar la figura del árbitro colaborador sino que consideran que adultera las competiciones y puede llegar a provocar «incidentes graves» entre los equipos participantes cuando haya algo en juego.
«Sin duda la consideración más poderosa y preocupante a la vez», esgrimen en el documento, «es la que preveemos suceda no tardando, (ya ha habido dos pequeños conatos de trifulca) y no es otra que la de incidentes graves de orden público, en los cuales la carga de la prueba recaerá sobre un árbitro colaborador que no es experto, que no está debidamente formado y que no tiene la autoridad que sí tiene un árbitro profesional».
Lamentan todos estos clubes el agravio que sufren frente a los equipos de la capital pese a soportar los mismos costes. «Estamos obligados a buscar un árbitro colaborador cuando estamos pagando lo mismo y, sin embargo, no recibimos los mismos servicios», apunta el presidente de uno de estos clubes, que considera injusto que pueblos con un solo equipo en una categoría no tengan fútbol un fin de semana por falta de árbitros, «o simplemente porque ese día ese colaborador no puede por un compromiso».
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En el escrito se recoge esta inquietud. «En nuestras localidades es más difícil encontrar esta figura del árbitro colaborador, ya que no disponemos de organigramas ni personal como los clubes de la capital, es difícil encontrar niños para completar los equipos, delegados, entrenadores, etc… en nuestros clubes raro es el que no hace de presidente, entrenador, encargado del material y ahora de árbitro, además creemos firmemente que unos arbitrajes no profesionales pueden redundar en una adulteración de resultados y de la competencia», se expone en el escrito remitido a la federación.
El documento tiene su origen en una reunión convocada el pasado 14 de octubre en el Multiusos de Villanubla a la que se ausentaron una serie de clubes. El resultado de las denuncias planteadas se plasmó al papel, de modo que los clubes que no pudieron asistir han dispuesto de unos días para matizar, adjuntar o bien aprobar lo allí expuesto.
El documento definitivo, con un solo añadido, fue registrado en el día de ayer en la sede de la Federación de Castilla y León con la firma (los escudos) de veintiún clubes de la provincia. El adjunto se refiere a la adulteración de las competiciones «ante errores» que se puedan cometer «por la falta de profesionalidad y preparación».
«Estamos seguros de que el colaborador arbitral lo hace lo mejor que puede y sabe, pero ante situaciones comprometidas la toma de decisión es diferente de alguien imparcial a alguien que no lo es», se expone.
El documento suscrito por los clubes termina solicitando una reunión liderada por la propia delegación que proporcione soluciones. Reunión a la que desde la propia federación no ven inconveniente pese a la dificultad que entraña atacar el problema.
El propio presidente del Comité de Árbitros de Castilla y León, Javier Tejedor, reconocía en estas mismas líneas el pasado 4 de octubre que la escasez de árbitros «es un mal endémico» que se produce cada año.
Tejedor cifraba entonces en 200 el número de árbitros para afrontar todas las competiciones, insuficientes a su juicio. «Más o menos es la misma cantidad que hace un año, el problema es que ha crecido el número de equipos participantes», aseguraba, descartando que se produzca un agravio comparativo entre clubes de la capital y los de la provincia.
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