Salto hacia la permanencia del BM Nava

En un duelo de nervios al borde del abismo, el conjunto navero supo templar mejor sus emociones, sobre todo en la segunda parte, en la que apeló a la defensa y a las paradas de Patotski para desarmar a un adversario que nunca se rindió y que llegó a ilusionarse con la victoria tras una buena primera mitad. Con este triunfo, el Viveros Herol confirma su trayectoria ascendente, tras sumar siete puntos de los últimos diez en juego, y afronta con algo más de confianza y optimismo el exigente calendario que se le avecina.

Las imprecisiones marcaron los primeros minutos del partido, sobre todo por parte del conjunto de Equisoain. El equipo local, consciente de que cualquier opción de permanencia pasaba por la victoria, saltó a la pista con un punto más de intensidad y ambición, lo que le permitió tomar ventaja en los primeros minutos. Los errores del cuadro segoviano fueron castigados de forma contundente por los locales, que en un visto y no visto lograron tomar ventaja (4-2). La defensa 6-0 del Villa de Aranda asfixió al Nava, que solo encontraba auxilio en ataque en las acciones de Rodrigo Pérez Arce, quien volvió a cuajar una actuación sobresaliente al anotar cuatro tantos casi consecutivos. Las paradas de Patotski, mucho más entonado que su homólogo en la otra portería, le dieron aire al equipo foráneo, que logró equilibrar el marcador del primer acto.

Con 6-7 en el luminoso, el técnico local pidió un tiempo muerto para frenar la reacción navera. La igualdad ya fue total durante los siguientes minutos, que depararon un brillante duelo entre Pérez Arce y Novais. Las diferencias eran mínimas para ambos equipos, hasta que un cambio defensivo de los locales ahogó al Nava. La defensa 5-1 sobre Simenas dejó sin opción de lanzamiento al equipo, que volvió a enredarse con la circulación, cayendo de nuevo en las pérdidas de pelota.

El colapso visitante fue aprovechado por el conjunto burgalés para dar un tirón en el marcador y situarse con una ventaja de dos tantos (11-9), lo que provocó la intervención inmediata de Equisoain, que pidió un tiempo muerto para evitar la escapada local tras un parcial de 4-1. Un par de acciones destacadas de Elustondo, muy activo en defensa y ataque, permitieron al Blasgón y Bodegas Ceres retirarse con ventaja a los vestuarios (14-12) a pesar de la excelsa actuación ofensiva de Pérez Arce.

El arranque de la segunda mitad confirmó la deriva de la primera. Viveros Herol Nava no lograba ajustar su defensa y Souto aprovechó la situación para mantener a su equipo por delante. Pero fue solo un espejismo, porque el grupo de Equisoain, liderado en defensa por Seabra, encontró por fin el equilibrio entre retaguardia y ataque para marcar un ritmo imposible para su rival. Un parcial de 0-4, con máximo protagonismo para Patotski y Pérez Arce, devolvió la ventaja al Viveros Herol Nava. Marugán, Mota y, sobre todo, D'Antino comenzaron a aportar sus goles y el encuentro se le puso cuesta abajo al equipo segoviano.

El técnico navarro, consciente de la importancia del momento y del partido, se dejó las rotaciones para otro día y mantuvo en pista a la misma estructura de equipo, mientras su rival buscaba con las variaciones algo de aire. Con 17-20 en el marcador, el conjunto local anotó dos tantos consecutivos que le dieron algo de vida, aunque fue su última bocanada de aire antes del desplome definitivo. La defensa sobre Novais y sobre el pivote Javi García ahogó el único caudal ofensivo de los anfitriones. Mientras, en el otro lado de la pista, aparecía el brazo del gigante Simenas como un látigo para castigar la defensa junto a los tantos de D'Antino. Viveros Herol entró en los últimos cinco minutos con ventaja de tres tantos y, pese a que su rival nunca se entregó, supo jugar los compases definitivos con oficio para minimizar riesgos y atar una victoria imprescindible para soñar con la permanencia.