El Recoletas se agarra a lo prematuro de la cita para tratar de arañar puntos en Granollers

El propio técnico, que ya estaba en esa última victoria y también en el empate cosechado en 2019 (28-28), se muestra optimista por lo prematuro de la cita. «Es un desplazamiento complicado, es verdad, pero este tipo de partidos nos beneficia porque nos coge al principio que es cuando puedes sorprender. Granollers tiene jugadores distintos y está en proceso de cambio, por eso siempre es mejor cogerlos al principio de la temporada que no al final. Aún así, son un equipo temible y es una pista difícil», apunta Pisonero sobre una jornada «atípica», en la que su equipo deberá «acoplarse a demasiadas cosas».

A este lado de la balanza, el Recoletas Atlético tiene unos cuantos motivos de peso que refuerzan su confianza. La primera victoria del curso lograda el domingo, la vuelta tras lesión de Alejandro Pisonero, la evolución de los jugadores incorporados este año,...

«La victoria del otro día nos pone en nuestro sitio, así que vamos con toda la ilusión del mundo y con la garantía de que los dieciséis jugadores que viajan podrán aportar», señala el preparador vallisoletano, consciente de las virtudes que atesora el rival. «Antonio (García) sigue en en primera línea, pero ahí tienen las novedades de Tarsi y Moyano (exNava). Son dos jugadores que deben acoplarse, pero a nivel individual son jugadores que dan. Y a mayores el crecimiento de otros jugadores, que hacen un cóctel espectacular. En ataque son el mismo equipo con los mismos recursos, pero defensivamente igual es donde más les está costando», apunta.

BM Granollers suma dos victorias (28-29 en campo de Anaitasuna, y 37-31 frente a Benidorm) y una sola derrota (en Cuenca, 38-35) en las tres jornadas disputadas.

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La vuelta de Pisonero júnior supone una mayor riqueza tátctica para el Recoletas. «Aporta muchas cosas, lo primero presencia porque es un jugador que nunca rehuye. Siempre está, y luego es un jugador muy táctico que puede ofrecer soluciones a todo tipo de situaciones», señala el técnico, que sigue trabajando con los suyos el aspecto defensivo. «Hemos perdido defensivamente a dos baluartes como Rubén y Darko, y jugadores nuevos como Lucas (Ribeiro) tienen mucho potencial defensivo, pero todavía no defiende a lo que nosotros defendemos. E insertar eso es díficil», admite Pisonero, que considera fundamental recuperar el tono defensivo del curso pasado «Si algo nos hizo grandes entre comillas el año pasado fue nuestro nivel defensivo. En ataque somos un requipo con más recursos, y ahora con Alejandro (Pisonero) tenemos algo que teníamos el año pasado. De hecho, el 60 por ciento de los entrenamientos este año van por ahí», admite.