Juan Bar cierra el primer triunfo en Liga del Recoletas Atlético Valladolid

La persistencia y la constancia suelen tener premio. Persistente y constante fue el conjunto vallisoletano apoyado en la portería por un enorme, colosal y añadan los sinónimos que quieran, Juan Bar. Estuvo de matrícula de honor. Sobrio cuando había que estar en la primera parte y espectacular en la segunda, deteniendo los contragolpes del Guadalajara, en particular de Fabio Chiuffa. El extremo derecho del conjunto visitante va a tener pesadillas con el portero argentino.

Otro de los nombres propios del partido fue el de Alejandro Pisonero. Atrás ha quedado su lesión. Su salida a la cancha permitió a su equipo asentarse en el juego, con una magistral dirección en la posición de central y contribuyendo además con cuatro goles.

Pero no todo fue la perfección absoluta. Hay detalles que el técnico del Recoletas va a tener que pulir. Por ejemplo, los minutos iniciales. Tanto en la primera parte como en los comienzos de la segunda, el equipo estuvo algo dubitativo, bien porque el rival empieza algo mejor, bien porque al Recoletas le cuesta coger el ritmo.

De hecho, fue el Guadalajara el que comenzó mandando en el marcador (3-4) en los primeros cinco minutos, con un Pancho Lombardi muy entonado (5 goles en esa primera parte), bien contrarrestado eso sí por Edu Calle (4). Esos minutos fueron un duelo realizador de ambos jugadores. Lombardi hacía mucho daño por el costado izquierdo mientras Edu Calle asumía la responsabilidad. De ese 3-4 se pasó a un 5-5 y de ahí a un 7-6. La primera vez que los vallisoletanos se ponían por delante en el marcador. Y ya no soltó esa ventaja.

Una fase de igualdad dio paso al despegue del Recoletas, que fue incrementando su renta hasta los cuatro goles (14-10), lo que obligó al entrenador visitante, Juan Carlos Requena, a pedir un tiempo muerto. El conjunto visitante acusó en exceso una exclusión de Lombardi mientras que el conjunto vallisoletano poco a poco se fue asentando en su juego, ajustó su defensa, Juan Bar seguía a lo suyo, y en ataque también fue mejorando para llegar al descanso con el resultado de 18-14 en el marcador.

En la segunda, de nuevo unos minutos iniciales en los que a los de David Pisonero les costó entrar en el partido. Un 19-17 puso una nota de inquietud, solventada con acierto por los locales para despegarse en el marcador con un 23-17 gracias al revulsivo que supuso la aportación de Miguel Camino en esa fase . El Guadalajara se acercó de nuevo en el marcador, lo que obligó al técnico local a pedir un tiempo muerto para poner orden y las cosas en su sitio.

Y a partir de ahí, el festival de Juan Bar. El conjunto vallisoletano perdía balones en ataque, el portero visitante Tobías mantenía a su equipo y el Guadalajara se lanzaba con rápidos contragolpes, emergiendo la figura del portero del Recoletas, agigantándose en cada acción. Y el Recoletas llegó al tramo final del partido sin verse inquietado ni amenazado para llevarse el choque por el resultado de 30-26 y sellar la primera victoria de esta temporada.