Croquetas vegetales

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Sin embargo, en este caso, consideramos una propuesta diferente, unas croquetas elaboradas con calabacín, queso y trocitos de jamón de york. Una forma diferente de prepararlas aunque hay cientos de posibilidades para hacer el relleno. En primer lugar, se troceará muy bien el calabacín mientras que en otro recipiente se bate un huevo con una pizca de sal, pimienta y el queso rallado. Luego se añade el calabacín y los el jamón de york picado y se vuelve a remover bien. Si es necesario se añade un huevo más.

Una vez enfriada esta mezcla en la nevera se le podrá dar la forma deseada, en este caso de croqueta, pero será necesario esperar al menos una hora y media. Luego solo habrá que darle la forma correspondiente y freírlas con cuidado. Eso sí antes hay que rebozarlas en pan rallado. Si el pan rallado no se adhiere, se bate otro huevo y se pasa por él antes del pan. Cuando el aceite de la sartén esté bien caliente se fríen hasta que queden tostaditas.

Al sacarlas para evitar el exceso de aceite se dejan reposando en un papel absorbente y se sirven.