Muere Concha Velasco

'La chica yeyé', la canción que le cambió la vida

Antonio Guijarro (letra) y Augusto Algueró (música) compusieron el tema para la película 'Historias de la televisión', rodada por José Luis Sáenz de Heredia en 1964. La cinta, estrenada el 3 de mayo de 1965, estaba formada por dos historias: 'Cuando los gorilas hablan por teléfono' y 'Una chica de fortuna'. Esta segunda trama contaba la historia de Katy (Concha Velasco), una joven vendedora de periódicos en el balneario murciano de Fortuna que en sus ratos libres cantaba en el grupo 'Katy and the three horses'. Con el objetivo de triunfar en el mundo de la música, la banda mandó su canción a un festival.

Ese certamen tenía su reflejo en la película con una escena que fue rodada ante cientos de personas en el Palacio de los Deportes de Madrid. «El público hasta pagó entrada para vernos filmar», recordaba Concha Velasco, el 21 de  agosto de 2019, en el programa de televisión 'A partir de hoy', en TVE.

El cantante Luis Aguilé hacía un cameo en aquella película y, según el guion, tenía que interpretar dos temas. Uno de ellos se titulaba 'Chico yeyé'. La escena se llegó a grabar y el equipo de la película se sabía la canción. Era pegadiza. No dejaban de tararearla. Aquel día de rodaje en el Palacio de los Deportes, la cosa se complicó. La jornada de grabación se prolongó más de lo deseado. Hubo que hacer más pausas de las esperadas. Para que el público no se cansara, el director de la cinta, José Luis Sáenz de Heredia, pidió a la banda Los Botines (integrada por Juan Pardo y Manolo González, los futuros Brincos) y a Concha Velasco, que cantaran varias canciones para entretenerlos. Entre ellas, interpretaron una versión de 'La chica yeyé' que fue tan aplaudida, tan bailada y tan celebrada, que la tuvieron que repetir varias veces. El realizador se dio cuenta de la potencia del tema en la voz de Concha Velasco y decidió incluirlo en la película. La casa Belter la publicó en disco. Se convirtió en exitazo. Estuvo 27 semanas seguidas en la lista de los más vendidos de 1965. Durante tres de ellas, como número uno. Y la intérprete no era una cantante, sino una actriz.

El tema ha alcanzado después una «trascendencia extraordinaria», asegura Virginia Sánchez Rodríguez en 'La banda sonora musical en el cine español' (1960-1969), una tesis doctoral que ahonda en este fenómeno, donde se subraya que «Concha Velasco (gracias a esta canción) ha pasado a la historia como abanderada de la mujer moderna». Este trabajo, publicado en la Universidad de Salamanca, defiende que Katy, el personaje de 'Historias de la televisión', se desmarca «de la mujer estandarizada en los años 60, dedicada a un hombre y a la familia, y alejada del ámbito laboral y sin poder de decisión. El personaje de Katy domina no solo las riendas de su vida, sino también las de su relación amorosa». Por eso, añade Sánchez Rodríguez en su tesis, «la canción ha pasado a la historia como estandarte de la mujer moderna, a pesar de que la letra no se ve desligada de la temática amorosa».

La canción se sumaba además a los nuevos aires de modernidad que llegaban asociados al término yeyé. Paloma Otaola González, profesora de la Université Jean Moulin Lyon, recuerda el origen de esta palabra, que se popularizó en Francia gracias a 'Salut les copains', un programa de radio, dirigido por Daniel Filipacchi, que, desde 1959 se emitía de lunes a viernes, de 17:00 a 19:00 horas. Allí se usaba el término 'chouchou' para referirse a la canción preferida de la jornada, que sonaba dos veces en el programa. En 1962, el espacio radiofónico saltó al papel con una revista del mismo nombre. Tenía a Chouchou como personaje-mascota, un joven con pelo 'beatle', vaqueros y camisa de cuadros. Y estaba también su novia, a la que llamaron 'Yeyé', con una estética inspirada en cantantes como France Gall, Sylvie Vartan o Françoise Hardy. A saber: perlo largo y lacio, flequillo, vaqueros y minifalda.

«En España, la moda yeyé se impuso con revistas como 'Fonorama' (1963-1968) y 'Fans' (1965-1967)», explica Otaola. «En el número cuatro de Fonorama se publicó el artículo 'El yeyé', sobre el fenómeno de los jóvenes franceses. Ser yeyé era sinónimo de joven y moderno». En ese contexto se compuso la canción que popularizó Concha Velasco, convertida en emblema de la época: «La imagen de la chica yeyé que encarna la aspiración de las jóvenes quinceañeras es la de una chica joven, dinámica, independiente, que decide por sí misma y que sigue la moda que viene del extranjero frente al estilo tradicional de mujer española», concluye Otaola.

El fenómeno musical de las chicas yeyé nacido en Francia tuvo ejemplos en Italia (Rita Pavone) o en España (con Marisol, Rosalía, Karina...). Pero ninguna de ellas ha tenido una relación tan estrecha con el término como Concha Velasco, conocida, ya de forma casi eterna, como 'la chica yeyé'. La culpa es de un tema «revolucionario» que ha tenido multitud de versiones Miguel Ríos, Olé Olé, Danna Paola, Chenoa, Los Tres Sudamericanos...), que es imposible de no tararear cuando alguien, como hizo Concha Velasco aquella tarde que recibió la Medalla de Oro de su ciudad, con ese: 'No te quieres enterar...'.