Sacyl contratará médicos sin especialidad ante la falta de facultativos de Familia

Con este panorama, Sacyl ha optado por contratar licenciados sin titulación. Así lo denuncia el sindicato UGT y así se lo confirmó este lunes en Mesa Sectorial, fuera del orden del día, la directora de Asistencia Sanitaria, Elena Cámara, ante las preguntas al respecto de estos representantes de los trabajadores.

La responsable sanitaria esbozó a las centrales sindicales las líneas fundamentales de este plan para paliar deficiencias en recursos humanos que UGT considera «inaceptable». Según revelan las portavoces de este sindicato, Marta Vian y Rosa López, Sacyl pretende, «según las explicaciones de la directora de Asistencia Sanitaria, contratar médicos sin el MIR, con tan solo la licenciatura de Medicina y únicamente en el caso de los de Familia y Comunitaria, no para otras especialidades también deficientes en recursos humanos». El destino es «el de cubrir las guardias de zonas rurales donde hay escasez de profesionales, las urgencias de los hospitales y se plantean también las consultas pero 'tuteladas' por un médico de Familia con la especialidad. Nos aclaró en cuanto a las retribuciones que serán idénticas porque legalmente no se puede contratar a alguien para el mismo trabajo por menos dinero aunque tenga menos formación». Y así «llegamos al deterioro de la Medicina de Familia. Igualan seis años de carrera con los once que supone llegar a ser médico de Familia, entre los seis de la Facultad, uno de preparación del MIR, como mínimo, y los cuatro como residente», critican.

Advierten asimismo que «al paciente le ofertan un profesional sin preparación y experiencia suficiente y además no es equitativo porque a unos les atenderá alguien bien preparado y a otros otra persona que está muy lejos en formación y capacitación. Y, por si fuera poco, en las consultas pretenden que un médico de Familia los tutele como si tuviera tiempo para ello», añaden estas portavoces de UGT.

Valoran asimismo que «es un menosprecio para la especialidad, que provocará que aún menos recién licenciados opten por esta especialidad cuando aprueban el MIR porque para qué formarse y especializarse durante años si te equiparan el puesto de trabajo con un recién salido de la Facultad. Y en el caso de los extracomunitarios, sobre todo, la preparación es además muy diferente de la española», destacan. «Nosotros tenemos una especialidad y cursos para realizar ecografías y pese a la falta de radiólogos, lo preguntamos también a la directora de Asistencia, no nos van a poner a hacerlas en su lugar. Es una medida que, aunque hay carencias en muchas otras especialidades, solo la toman contra la AtenciónPrimaria», defienden.

UGT estudia, por todo ello, «emprender acciones legales contra tal atropello de la especialidad y de la atención a los usuarios».

La central apunta a que «nada de esto se ha negociado con los sindicatos en mesa sectorial por lo que buscarán una fórmula tipo decreto para saltárselo. Y podemos entender que en pandemia se optara por esta excepcionalidad e, incluso, hace muchos años cuando se quiso regularizar los muchísimos médicos que había sin formación MIR llevando consultas, los famosos Mestos... pero ahora es inaceptable volver a crear estas desigualdades y falta de reconocimiento a la medicina Familiar y Comunitaria», reivindican ambas portavoces, también médicos de Familia las dos.

Desde Sacyl acotan esta medida y aseguran que es para extracomunitarios. «Son unas instrucciones internas que se han enviado a todas las gerencias de Atención Primaria para que se actúe de la misma manera a la hora de contratar extracomunitarios. Es decir, que en todas se sigan los mismo pasos. Primero se acude a la bolsa para comprobar si hay o no profesionales, se publican las ofertas de trabajo a través de las redes sociales... porque el objetivo es garantizar la asistencia. Pero que no es ningún decreto», apunta la Consejería de Sanidad.

La contratación de médicos no especialistas figura ya, por ejemplo, entre los asuntos para tratar en la Junta de Personal de Soria que se celebrará este jueves.

Sacyl reclama con frecuencia a través de sus redes médicos sobre todo de Atención Primaria para cubrir vacantes; pero la escasez se arrastra desde hace años y las convocatorias del MIR aunque han aumentado su oferta están muy lejos de cubrir necesidades. La dotaciónl actual es de 2.480 médicos en Primaria, con 196 puntos de atención continuada y en las urgencias hospitalarias hay 288, según los datos de plantilla orgánica de Sacyl.

No es la primera vez que la polémica por contrataciones fuera del marco habitual salta a la opinición pública; pero lo habitual –y aún así con controversia– fue esta apuesta por facultativos con título y especialidad homologada. Un recurso al que Sacyl recurre especialmente para el medio rural, zonas de difícil cobertura y épocas de vacaciones.

La carencia de estos profesionales se prolongará de forma sustancial al menos hasta 2027, fecha en la que las autoridades sanitarias calculan que se pueda empezar a equilibrar el número de médicos que se jubilan o abandonan el sistema con los que entran nuevos vía MIR. En tan solo un lustro, el 60% de los médicos de Familia de Castilla y León se jubilarán. Aunque todos los residentes que acaban su especialización en los hospitales y centros de Castilla y León se quedaran en la comunidad, sólo cubrirían el 60% de las vacantes que dejan por edad quienes abandonan la vida activa. Y, la realidad que los datos se ponen cada año sobre la mesa es de apenas un 30% los que escogen quedarse en esta región.

Actualmente, en Castilla y León ya trabajan profesionales sin título homologado en Medicina Familiar y Comunitaria que ejercen sus funciones en centros de salud y consultorios locales de las distintas gerencias de Sacyl. Ahora , destaca UGT, «buscan incrementar este recurso y regularizarlo, estandarizarlo como una forma de provisión de personal habitual». Es esta una de las medidas para paliar el déficit de facultativos que, además, sufre –llegado el caso– el obstáculo de la lentitud para homolgar títulos en España.

Otras medidas en marcha son las de lograr garantizar que el sistema de elección MIR no deje plazas desiertas y que se cree ya la Especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias que ahora mismo, dado que se nutre de médicos de Familia,'roba' especialistas a los centros de salud. Una vieja reivindicación de Sacyl es la de ampliar el número de plazas de formación en Medicina Familiar y Comunitaria para afrontar el relevo generacional e, incluso, sacar una convocatoria extraordinaria.

La Junta también plantea la creación de un registro estatal de profesionales sanitarios que pueda servir para orientar las necesidades de formación y evitar así la carencia en determinadas especialidades.

Para trabajar en España los profesionales extracomunitarios deben tener una situación migratoria regular, homologar su título de medicina general y colegiarse. Para poder ejercer en un campo específico, su título de especialista debe ser reconocido también.

La legislación española exije para ejercer disponer del correspondiente título oficial español o reconocimiento u homologación de uno extranjero, estar colegiado, no estar suspendido o inhabilitado para el ejercicio de la profesión, disponer de cobertura de responsabilidad civil profesional y el ejercicio profesional debe realizarse siempre en un centro sanitario autorizado por la comunidad autónoma en la que se ubique. Y el examen MIR se exige a los graduados en Medicina, tanto españoles como extranjeros, para que puedan acceder a una plaza de médico especialista, cuya formación como médico residente dura entre cuatro y cinco años.

El reconocimiento del título de grado corresponde al Ministerio de Educación y el de especialista al de Sanidad. Homologar la especialidad es algo más complejo sobre todo para los solicitantes procedentes de países latinoamericanos, ya que, en España, y en casi toda Europa, esta formación se imparte en los hospitales y en estos países, en la universidad. En cualquier caso, tantos unos como otros, deben demostrar la calidad de su formación, que se realizará al amparo del el Real Decreto 459/2010 de 16 abril.