Castilla y León
Secciones
Servicios
Destacamos
Secciones
Servicios
Destacamos
El número de menores condenados por delitos sexuales aumentó el 38% en Castilla y León. En concreto, la cifra incrementó desde los 21 procesados hasta los 29 y creció en cinco de las nueve provincias, mientras que se mantuvo en dos y disminuyó en otras ... tantas, como refleja el Instituto Nacional de Estadística. El dato de la comunidad es además el más alto de la serie recogido por el INE y que alcanza hasta 2017. En los últimos días se han producido en la comunidad nuevos casos relacionados que han tenido a menores como protagonistas. El último de ellos en Palencia, donde la Policía Local investiga un posible caso de difusión de imágenes sexuales entre menores en un centro escolar, fotografías que fueron difundidas a través de redes sociales. El uso de las nuevas tecnologías se ha relacionado también durante las últimas semanas en otro caso, esta vez a nivel nacional. Ha ocurrido en Almendralejo, el municipio de Extremadura donde varias menores fueron desnudadas a través del uso de inteligencia artificial.
Noticias relacionadas
Sergio García
Sergio García
Estos últimos casos traen de nuevo el debate sobre el uso correcto de las nuevas tecnologías en menores, que ahora son la primera generación que ha tenido acceso a internet y a un teléfono móvil desde la infancia. No solo eso, sino también sobre la importancia que tiene la educación sexual para prevenir estas conductas, así como los efectos nocivos que puede causar la pornografía en los menores. Desde las asociaciones consultadas coinciden en destacar que el incremento de los condenados también tiene una visión diferente, donde este incremento también significa que ahora existe una mayor conciencia sobre qué es un abuso. «Es también importante reconocer que actualmente hay una mayor información y conocimiento para detectar cuándo se está ante un delito sexual. Esto también hace que haya más denuncias y que, por consiguiente, existan más condenas de menores», avanzan desde Dialogasex.
«La única herramienta es la educación». Con esa frase resume David Cortejoso, psicólogo experto en nuevas tecnologías, la manera de reducir los casos de adicciones a las pantallas entre los menores. Una educación que también incluya a las familias, para que sean conscientes de cuándo existe un uso abusivo y cuándo comienza a ser un problema. Cortejoso incide también en la problemática de la pornografía y cómo los menores la encuentran muchas veces de manera involuntaria con el uso cotidiano de los dispositivos. Anuncios, ventanas emergentes que aparecen por hacer un clic o imágenes en redes sociales hace que los jóvenes se encuentren con este tipo de contenido sin que haya una búsqueda activa del mismo. «Se lleva un tiempo alarmando sobre el tema. Tienen acceso a herramientas digitales muy pronto y ahí pueden acceder a contenidos que no entienden y que no saben gestionar. Son cosas que influyen en su educación y también en cómo interpretan la sexualidad», explica.
El psicólogo concreta que una de las cosas que deben entender las familias es que, tarde o temprano, los menores se van a topar con la pornografía en internet. Para ello, Cortejoso habla de una educación previa para que los menores no se creen imágenes irreales sobre las relaciones. «Todavía falta mucho por hacer en la educación sexual. Existe vergüenza por parte de los padres para abordar este tema, que es tan importante. A partir de los once años se debería comenzar a tratar activamente para que no haya una influencia negativa. Si no se educa, al final lo acaban encontrando en internet y este no puede ser su profesor. Lo que ven son cosas irreales y detrás hay una empresa que quiere ganar dinero. Esto ha derivado en que los contenidos sean cada vez más duros y es lo que los menores pueden encontrar en internet», comenta.
Otro de los aspectos que pueden encontrar en internet y que puede influir en esta educación son algunos discursos negacionistas de la violencia sexual. En referencia a ello, Cortejoso apunta a que los modelos a seguir han cambiado con los años. «Antes era más difícil que el discurso de una persona llegara. Ahora, cualquier usuario puede escribir un mensaje, ya sea verdad o no, y que tenga miles de visualizaciones. Se debe enseñar a contrastar, a no compartir tan fácil sin saber si algo es verdad. Al final los menores son muy influenciables y ahora tienen acceso a cualquier opinión», apunta. El perfil de los menores que presentan una adicción a las nuevas tecnologías no es definido y cualquiera puede caer en estas actitudes abusivas, concreta el psicólogo. «Nos encontramos con casos de chicos y chicas que viven en diferentes tipos de familia. No existe un perfil concreto en este caso, lo que significa que es una adicción que puede aparecer en cualquier ámbito», culmina.
La Consejería de Educación concreta que la enseñanza afectivo-sexual aparece en diversas materias a lo largo de las diferentes etapas educativas y, según la normativa, está presente en la educación Primaria, Secundaria y en Bachillerato. Desde Educación también explican que los docentes son los encargados de ajustar los contenidos a la tipología y edad del alumnado en sus programaciones didácticas. Una norma, aseguran, de aplicación en todos los centros de la comunidad donde se imparten dichas enseñanzas.
La evolución del número de menores condenados por delitos sexuales en la comunidad es irregular. Mientras en su mayoría aumenta o se mantiene, solo desciende en León, donde baja de tres en 2021 hasta uno en 2022, y en Valladolid, que pasa de ocho condenados a seis. Por su parte, se mantiene en Ávila y Segovia, con dos y uno respectivamente. En el resto de las provincias sufren un aumento. Así, en Burgos pasa de uno a cuatro, en Palencia de uno a tres, en Salamanca de cuatro a cinco, en Soria de uno a tres y en Zamora de cero a cuatro. Además, 2022 es el primer año de la serie, que alcanza hasta 2017, donde todas las provincias de Castilla y León tienen menores condenados por delitos sexuales. Las provincias de Palencia, Salamanca, Soria y Zamora alcanzaron en 2022 el máximo de menores condenados por delitos sexuales.
Además, según recoge la Memoria 2023 de la Fiscalía de Castilla y León, que fue presentada a inicios del mes de septiembre, los delitos contra la libertad sexual crecieron casi un 20% en 2022 en la comunidad, hasta alcanzar los 1.354 procedimientos incoados, 1.021 sin diligencias previas, concepto que se incrementa hasta el 25%. En concreto, se acordaron 32 medidas de prisión provisional, un 18% menos que en el año anterior. Los delitos más calificados fueron los abusos sexuales -61 casos-, 10,9% más que en 2021, seguidos del de abusos sexuales a menores de 16 años -57-, un 46,1% más respecto al año anterior.
501 menores
Fueron condenados en 2022 por estos delitos, 389 de ellos por abuso y agresión sexual.
A nivel nacional, 501 menores fueron condenados en 2022 por delitos sexuales, un 14,1% más que en 2021. Los menores de edad cometieron 636 delitos de este tipo, de los que 389 fueron considerados de abuso y agresión sexual a menores de 16 años, 134 de abuso sexual y 27 como agresión sexual, de las que cuatro fueron considerados como violación. Por edad, el grupo de 17 años fue el que tuvo la mayor tasa, el 8,7%.
Según los datos de la Fiscalía Provincial de Valladolid, durante 2022 algunos menores realizaron varias infracciones tipificadas como delito sexual. En concreto, hubo nueve menores juzgados por agresión sexual y seis por abuso sexual. A nivel general –teniendo en cuenta el resto de delitos cometidos por menores–, la mayoría de los condenados fueron puestos en libertad vigilada, mientras que 32 tuvieron que realizar prestaciones en beneficio de la comunidad. Durante 2022, solo se produjeron 17 internamientos, dos en régimen cerrado, ocho en semiabierto y siete terapeúticos. Además, hubo 25 condenados a permanencia de fin de semana. En cuanto a las estadísticas de datos de expedientes de protección de menores, en 2022 se gestionaron un total de 589, un 29% más que en 2021. Además, se concretaron 151 expedientess de protección de menores en tutela autonómica, 84 en situación de riego y 67 de protección de menores en Guardia.
A nivel nacional se ha vivido un incremento y se superan los 500 menores condenados por estos delitos desde que el INE tiene registros. En el último año, el aumento en España ha sido del 14%, por lo que Castilla y León duplica además esta subida. En general, la mayoría de las comunidades han sufrido un incremento de los menores condenados por estos delitos, con Cataluña como el territorio donde más ha aumentado, con 28 procesados más. Siguen Murcia con un incremento de 15, Madrid con nueve y después aparece Castilla y León, que tiene el cuarto mayor aumento a nivel estatal con ocho menores condenados más. Por su parte, lo menores cometieron 636 delitos de tipo sexual, un 4,4% más que en 2021, recoge Ical. De estos, 389 se tipificaron como abuso y agresión sexual a menores de 16 años, 134 abusos sexuales y 27 agresiones sexuales, siendo cuatro de ellas violaciones. Los adultos cometieron 3.835 delitos, un 3,2 por ciento menos que en 2021, con 762 de ellos considerados abuso y agresión sexual a menores de 16 años, 1.458 abuso sexual a mayores y 462 agresiones sexuales, de las que 46 se consideraron como violación.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.