Personal sanitario en una emergencia del pasado marzo en Segovia. Antonio de Torre

Castilla y León

Médicos y enfermeras de Emergencias se movilizan para exigir una normativa tras 24 años

Trabajan hasta 35 horas seguidas en la ambulancia sin descanso y no cobran ni festivos ni noches

Ana Santiago

Valladolid

Jueves, 28 de septiembre 2023, 00:02

¿Puede un médico, o un enfermero, atender en condiciones una urgencia sanitaria cuando arrastra hasta 35 horas de trabajo? Esta es la realidad, y no anecdótica, que relatan los profesionales que trabajan en Emergencias Sanitarias. Tanto los que coordinan en el centro los dispositivos ... a enviar a una llamada como los que se suben a una UME para atender un infarto, una fractura por una caída, un ictus o un accidente. Y llevan así años. Una situación «que crea inseguridad para el paciente porque estás cansado, sin las capacidades adecuadas y despiertas y para el profesional que puede terminar en el juzgado», describen desde el sector.

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El 10 de diciembre de 1999 se creó el servicio de Emergencias-Sacyl extrahospitalarias. Tres consejeros de Sanidad, incluido al actual, firmaron un documento de salida de huelga –por lo que no llegó a celebrarse– pero que nunca se cumplió. Y hasta aquí han llegado los médicos y enfermeras que día a día se suben a una ambulancia para sacar adelante un infarto o atender un accidente de tráfico.

El día 1 de octubre, este domingo, arrancan sus movilizaciones para reclamar algo que tienen todas las demás comunidades en España, una normativa propia que ampare sus jornadas, sustituciones, guardias, retribuciones... y «no que cuando le conviene a Sacyl seamos de AtenciónPrimaria y cuando no, de Hospitalaria, o de nada. Con menos derechos que ambas como el no cobrar ni noches ni festivos, como llegar a alcanzar las 35 horas de trabajo sin descanso porque no hay sustitutos y algún profesional se ha puesto enfermo porque todavía no han creado un sistema de gestión de estas incidencias. Además depende de la voluntad de quien coge su teléfono, el privado, para hacerse cargo de la jornada del compañero que está de baja», es el primer repaso de Carlos Martín Marcos, médico de una UME y presidente de ASECYL.

Es esta una nueva asociación «sin color político ni sindical» para reivindicar «la diginidad» profesional de este colectivo, para «denunciar la mala gestión y el maltrato de médicos y enfermeras de este servicio, para exigir una normativa que nos regule y ampare nuestros derechos y la conciliación de la vida laboral y familiar», destaca.

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Una reivindicación que comparten con la sociedad científica SocalemFYC y sindicatos y que ya tiene en marcha una batería de medidas que arrancarán este domingo y que evitan la huelga, fundamentalmente porque son conocedores del servicio tan sensible del que se trata. No obstante, desde ASECYL piden «disculpas a la población;pero la solución es tan fácil como crear nuestar normativa propia como Ptrimaria o Especializaad, definir bajas, horarios...».

Entre las medidas figuran el abandono de su actividad docente. Nor formarán ni los MIR ni a los EIR ni a alumnos ni a nuevo personal. Tampoco atenderán el teléfono para esas incidencias para cubrir ausencias ni atenderán a esos correos de Sacyl en el que les comunican que deben cubrir una baja con 35 horas laborales. Es decir, que desde el día 1 podrá haber ambulancias sin médico o enfermera.

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Son 340 los trabajadores en plantilla y 219 forman parte de la nueva asociación. De ellos, hasta ahora, 197 cumplirán con las medidas, otros apoyan la reivindicación pero no las aplican por sus circunstancias laborales. Un 60% rechaza en estos momentos realizar docencia.

«Es el nuestro uno de los servicios mejor valorados de Sacyl durante la pandemia. El que entraba en las casas, el que trasladaba a los enfermos y este es el trato de Sacyl», añaden. «Creemos en la buena voluntad de la Gerencia de Salud y que con el apoyo de los sindicatos y de ASECYL se conseguirá mejorar las condiciones laborales -explican- para lograr un servicio de calidad y seguro para el paciente».

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Critican además que la reciente reunión entre los coordinadores de las unidades -hay 29 incluido el centro coordinador, cinco de unidades móviles de emergencia de enfermería y 23 medicalizadas- y responsables de Emergencias ha resultado bastante negativa «porque hay amenazas veladas, coacciones y ha anunciado que van a limitar el número de guardias que podemos intercambiarnos, lo van a limitar y otros cambios inminentes como suspendernos la docencia durante un año entero... Este es el tono de las reuniones además de prohibirles contar a los profesionales lo que en ellas se habla», apuntan fuentes del sector.

Sin embargo Sacyl responde que «la Gerencia de Emergencias no va a cesar la formación. Algunos profesionales han dejado de ser colaboradores docentes, algo que también puede ocurrir en Primaria u Hospitalaria. Esto lo que conlleva es que hay que ajustar la oferta formativa. El resto de reivindicaciones deben tratarse en mesa sectorial.

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