Suárez-Quiñones asume las políticas de población y Mañueco convierte a Isabel Blanco en el 'dique' frente a Vox

El decreto dibuja una división de Fomento y Medio Ambiente en la que el peso vence hacia este último departamento, que se denomina ahora Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio. A esas materias, Suárez-Quiñones suma las políticas de población, en una comunidad con un padrón que se deja habitantes en cada recuento. Además de lo que pone en su denominación, con toda la parte verde de lucha contra incendios, ciclo de agua, política forestal, espacios protegidos, cambio climático y transición energética, lo relacionado con la vivienda y la ordenación territorial y el mapa rural pendiente para reorganizar servicios, que es un proyecto de especial dificultad, el leonés mantiene la gestión de las políticas de Protección Civil y emergencias y la coordinación de policías locales.

De su anterior departamento deja para la Consejería de Movilidad y Transformación Digital, el transporte y las infraestructuras, la logística y carreteras, las telecomunicaciones y la extensión de Internet. El éxito de la gestión de la nueva consejera, María González Corral, dependerá de su eficacia en el aprovechamiento de los fondos europeos de recuperación Next Generation.

Junto a Carnero y Suárez-Quiñones hay una tercera persona que gana consistencia en el gobierno autonómico y es la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades. Isabel Blanco continúa al frente de un departamento altamente sensible con un socio como Vox y que servirá de termómetro para determinar hasta qué punto el PP frena las pretensiones más ideológicas de los de Santiago Abascal o se somete a ellas. A la gestión de las políticas de promoción de la mujer y lucha contra la violencia de género, Isabel Blanco asume «adicionalmente, la coordinación e impulso de la política de integración de los extranjeros inmigrantes», según recoge el decreto. Y esto lo hace con un acuerdo de Gobierno que incorpora por exigencia de Vox el concepto de «inmigración ordenada» y un socio que encuadra esta con declaraciones que distingue entre migrantes, situando como causa de problemas sociales y conductas delictivas a los procedentes de África.

Mañueco convierte a Blanco en una suerte de 'dique' político frente a Vox dentro del gobierno de coalición. «No vamos a dar un paso atrás en la lucha contra la violencia de género», recalcó la consejera tras su toma de posesión. La zamorana también anunció que retomará la reforma de la ley autonómica de 2010 sobre Violencia de Genero que frenó el adelanto electoral de diciembre y que la normativa que combate la violencia machista es «compatible» y «no se solapa» con la que exigen los ultraconservadores de Violencia Intrafamiliar.