Igea y Tudanca se lanzan la gestión de la pandemia para atacar a sus gobiernos

El clima de «todos a una» que se vivió al inicio de la pandemia, cuando Alfonso Fernández Mañueco compareció por primera vez en la Diputación Permanente de las Cortes para explicar la situación, se ha ido definitivamente por el desagüe. Los desencuentros del Gobierno regional y el Gobierno central han terminado por convertir la política de Castilla y León en un terreno de confrontación más, con los de Tudanca defendiendo cada paso de los de Pedro Sánchez y PP yCs lanzados al ataque.

Tudanca, de hecho, se basó en el Consejo de Gobierno extraordinario, que adoptaba medidas adicionales fijadas en el decreto de estado de alarma, para asegurar que la petición de obtener más «herramientas» legales por parte de la Junta solo buscaba la confrontación «con el Gobierno, como Ayuso y Casado, perjudicando a los castellanos y leoneses».

El secretario regional de los socialistas acusó a la Junta de no haber tomado «ninguna medida hasta el día 15 de enero» y cuando lo hicieron fue para imponer un toque de queda «que seguramente es ilegal, pero sobre todo inútil».

A esas palabras respondió Francisco Igea con un relato de los hechos desde primeros de enero, como ya hizo días atrás la consejera de Sanidad, Verónica Casado. «¿Que no se han tomado medidas? En decrecimiento de la incidencia se tomaron medidas que el Gobierno no quiso tomar antes de las navidades, restringiendo los alivios previstos en el Interterritorial. La primera semana se tomaron medidas. El día 14 también. Que acusen a este Gobierno de caos con lo que estamos viendo en el Gobierno nacional es, cuando menos, irónico», explicó Francisco Igea.

Tudanca llegó a comparar al tándem Mañueco-Igea con Donald Trump haber llamado a la rebelión cívica, aunque Igea en su momento matizó que se refería a una rebelión «contra el virus». La respuesta del vicepresidente y portavoz fue que si se parece es en el peinado. Y acusó al Gobierno de «anteponer sus intereses a la salud de la población española» por no modificar el estado de alarma.