Son urgencias. Siete de cada diez pacientes que requieren hospitalización llegan a través de este servicio, mientras que la actividad programada –aunque sería lo más deseable– se queda muy relegada. Así que los 14 hospitales de Castilla y León suman 169.087 altas al año ... de personas que tuvieron que ser ingresadas tras pasar por urgencias, y eso que solo el 16,21% de las mismas necesitaron hospitalización. El ingente movimiento de actividad asistencial que suponen las heridas, enfermedades, infartos, ictus, malestares, accidentes... que llevan hasta estas unidades suman más de un millón de visitas a estas unidades cada año.
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Fueron –según los últimos datos globales cerrados, de 2022– 236.391 las personas ingresadas y dadas de alta; de ellas, por lo tanto, solo 67.304 de forma programada. Y los que precisan hospitalización inmediata para su tratamiento o cirugía suman unos tres o cuatro días más de estancia media, casi llegan a los ocho, frente a la mitad de quien, aunque necesita esta atención, llega al hospital de forma pausada y con sus pruebas y diagnósticos preliminares, hechos bajo la calma de la programación.
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Ana Santiago
Por grupo de edad, el mayor porcentaje de ingresos urgentes es el de los bebés, menores de doce meses, y le sigue el otro extremo, el de 75 o más años.
Y estas emergencias llegan de la mano de enfermedades del aparato circulatorio (16,2%), problemas respiratorios (13,8%) y patologías digestivas (12,8%).
Con ingreso programado, los grupos de diagnóstico más frecuentes en cambio son las neoplasias –todo tipo de cáncer– (24,1%), seguidas del aparato digestivo (16,5%) y la traumatología y similares con problemas musculoesqueléticos y del tejido conectivo (12,9%).
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El movimiento de los hospitales es enorme. El año pasado, los castellanos y leoneses sumaron 3.996.207 consultas, de las que más de 1,8 millones fueron una primera cita con el especialista hospitalario. La mitad de los habitantes de la comunidad pisa al menos una consulta al año. La frecuentación en Atención Hospitalaria ha tenido una tendencia ascendente en el período 2005-2019, hasta las 1.858 consultas por mil tarjetas sanitarias. En 2020 disminuyó, pero de nuevo se ha incrementado en los últimos años y 2022 se sitúa en 1.731.
Los datos de la Consejería de Sanidad también revelan que de las intervenciones quirúrgicas, que fueron 305.853 el año pasado, 21.856 fueron urgentes.
¿Por qué ingresan los pacientes en Castilla y León?
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Las enfermedades del aparato digestivo, que suponen el 13,8% del total junto con las del aparato circulatorio (13,7%) y el respiratorio (11,5%), son las principales causas de ingreso en los hospitales públicos de Castilla y León.
Las primeras, habituales protagonistas en toda España, Europa o EE UU, engloban un altísimo espectro, desde úlceras estomacales a cáncer, problemas con la vesícula biliar como cálculos biliares, con el páncreas como pancreatitis, el hígado, como quistes hepáticos, problemas con los intestinos, como la celiaquía, disentería, enfermedad de Hirschsprung, síndrome del intestino irritable y colitis ulcerosa, diverticulitis, cáncer de colon o pólipos.
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El corazón, principal causa de muerte además, acapara cientos de ingresos (32.361 en concreto).Desde la aterosclerosis, hipertensión, infarto de miocardio y otros accidentes cardiovasculares hasta arritmias e insuficiencia cardíaca.
Las respiratorias, con muchos casos de la mano de la covid, incluyen problemas como los enfisemas, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, cáncer o insuficiencias. Son las tres principales causas de ingresos en conjunto. Por sexos, en la mujer es el embarazo, parto y puerperio (con un 12,2% del total), lo que más ingresos ocasiona. El nacimiento de un bebé supone 8.574 nuevas madres hospitalizadas al año. Le sigue al aparato digestivo con el 12% -que en los hombres alcanza el 15,7%-, igual que los problemas del corazón con similar porcentaje, que suben también dos puntos en los hombres.
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En cuanto a las edades, los ingresos crecen con las mismas y es mayor el número de altas en hombres que en mujeres, salvo en el grupo de 15 a 44 años, donde se disparan los ingresos femeninos al estar relacionados con la edad fértil de la mujer.
Por grupo etario, a partir del primer año, a medida que aumenta la edad de los pacientes, también lo hace su tiempo en el hospital, en ambos sexos. Y, por otro lado, el 50% de los bebés menores de un año están menos de tres días y los menores de entre los doce meses y los 14 años son los que menos tiempo permanecen ingresados, la mitad menos de dos días.
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En los hospitales de Sacyl, la mayoría de los casos son de gravedad clasificada como 'menor' en las intervenciones quirúrgicas, y 'moderada' en los procesos 'médicos'. En ambos casos tanto en hombres como en mujeres.
Entre los bebés, el principal motivo de ingreso son las afecciones originadas en el período perinatal (45,2%); pero a partir de dicha edad y hasta los 14 son las enfermedades del aparato respiratorio (27,9%) las que más ingresos provocan. Mientras que entre los 15 a 44 años acapara el dato los ingresos por motivos ginecológicos y obstétricos (38,1%)y de los 45 a 64 años, las patologías digestivas (18%) y oncológicas (15,6%), un orden este último que se invierte a partir de dicha edad y es el aparato circulatorio (20,5%) el que más falla entre octogenarios y nonagenarios.
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