Lo tenía claro desde el principio y no le ha costado reafirmarse en su decisión. El presidente del Consejo Asesor de la Memoria Histórica y Democrática de Castilla y León, Ángel Hernández, ratifica la dimisión que ya anunció a mediados de febrero si se materializaba ... un pacto de gobierno en la región entre PP y Vox. Finalmente, la entrada en las Cortes de Juan García Gallardo, quien ha expresado en reiteradas ocasiones su intención de derogar el Decreto autonómico de Memoria Histórica (y hacer lo propio con la ley de Violencia de Género) ha sido el detonante aunque no la única causa de la primera dimisión tras la entrada de Vox en el gobierno regional.
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Pese a que en el programa de Gobierno para esta legislatura (la número 11) en Castilla y León no aparece reflejado el requisito que deseaba Vox de derogar el citado decreto. «Da lo mismo, me marcho por incompatibilidad democrática y ética, no voy a estar con esta gente», asegura Hernández.
El todavía presidente del Consejo Asesor de la Memoria Histórica y Democrática de Castilla y León no va a compartir espacio «con personas que ni son demócratas, ni están por la labor de que se revise lo que han hecho sus abuelos», sentencia a la vez que afirma que «debe ser que para ellos la violencia familiar es una broma y lo de sacar a gente que ha sido asesinada de las cunetas es reabrir heridas».
Lamenta la situación en la que ha quedado Castilla y León tras el adelanto de unas elecciones cuyos resultados se han materializado en lo que considera «un gobierno que nace desde la indecencia y que se va a mantener en ella» y asegura que se niega a «blanquear la extrema derecha».
Hace unas semanas mandó una carta abierta a Mañueco en la que le señalaba «la necesidad de defender este decreto, lo que hemos conseguido y la hoja de ruta», explica Hernández. No ha tenido respuesta por parte de Mañueco, tampoco la espera. En el documento mostraba el compromiso del Consejo de Memoria Histórica para seguir ayudando en la localización de fosas, exhumación e identificación de los restos humanos e impulsaban un mapa de Fosas de Castilla y León, así como los pasos a seguir en los próximos meses con la ampliación de actividades divulgativas o la elaboración de contenidos didácticos que fuesen introducidos en los centros educativos de Secundaria y Bachillerato.
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Susana Escribano
Desconoce si finalmente se llegará a la derogación del decreto pero no dará marcha atrás. «Ojalá que no lo hagan y que quien me sustituya tenga más suerte que yo», añade. No sabe si a la suya le seguirán más dimisiones por parte de las personas que conforman el Consejo Asesor de la Memoria Histórica y Democrática de Castilla y León donde están representadas las Asociaciones de Memoria Histórica, representantes de las Universidades Públicas, la Federación de Municipios, los principales sindicatos (CCOO y UGT), miembros de la Consejería de Cultura y Patrimonio y de la cartera de Transparencia. «Alguno se ha puesto en contacto conmigo pero yo no quiero influir en nadie con mi decisión. Ellos sabrán lo que tienen que hacer», asegura.
El pacto entre PP y Vox le parece «un error histórico desde el punto de vista democrático, está claro que la derecha española lo va a pagar caro, ya estamos viendo incluso las reacciones desde Europa. Aquí parece que todavía no hay categoría política y que todo vale para gobernar, incluso poner al zorro a cuidar gallinas».
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Según Hernández, no ha existido problema alguno desde que se materializó el decreto el 12 de abril de 2018 con el gobierno popular de Juan Vicente Herrera y con la implicación del entonces ex vicepresidente de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, «que fue quien se encargó de toda la gestión política». Pero para Hernández se ha llegado a un punto de no retorno, en declaraciones anteriores expresaba la idea de que dejar pactar a PP con Vox era «jugar con fuego» y tiene claro ahora que «Castilla y León se ha quemado. Solo les ha faltado anunciarlo el 4 de marzo», señala Hernández aludiendo a la unificación de Falange y las Jons que tuvo lugar en 1934 en el Teatro Calderón, «otra vez damos una imagen acojonante», finaliza.
Dejará el cargo como entró, «por los cauces institucionales». Por eso, cuando se conforme el nuevo Gobierno solicitará una reunión del Consejo para presentar de forma oficial su dimisión, aunque aún se desconoce quién será el responsable político de la Consejería de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior a la que está adscrito el Decreto de Memoria Histórica.
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