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El inicio del curso escolar asalta el calendario con muchas preguntas y pocas respuestas. Para las familias, pero también para los alrededor de 30.000 docentes que atienden a los alumnos en colegios públicos y concertados de Castilla y León.
«Hay incertidumbre y ... preocupación». Isabel Madruga, presidenta autonómica del sector de Educación de CSIF, responde así cuando se le pregunta sobre cómo se está planteando la vuelta a la aulas con la Covid-19 en la calle. ¿Qué va a pasar con los docentes mayores de 60 años, los diabéticos, los que padecen inmunodeficiencias o cardiopatías o con las maestras y profesoras embarazadas? No está claro. Se les etiqueta como TES (trabajadores especialmente sensibles ante el coronovirus), lo que implica contemplar el riesgo de contagio que supone para ellos el contacto con compañeros y alumnos en su quehacer laboral.
Los docentes están catalogados, en conjunto, como personal de bajo riesgo frente a la pandemia. De los cuatro niveles establecidos, se les ha situado en el más leve, el 1, que se aplica a colectivos que tratan con personas sin síntomas, con distancia de seguridad y mascarillas. «Algo que no está claro que describa lo que puede ocurrir en una clase con niños», señalan desde los sindicatos.
«Lo que tenemos para valorar el riesgo es un protocolo muy, muy largo. Los compañeros deben indicar lo que les pasa a los directores de los centros, que oficialmente tendrían que estar aún de vacaciones; estos, comunicar la situación de este compañero a la Dirección Provincial, que le remitiría a la mutua para una valoración médica. Con este informe, un técnico de salud (y prevención de riesgos laborales) decidirá cómo se adapta el puesto de trabajo», relata Elena Calderón, secretaria general de Educación de CC OO Castilla y León, que recuerda que el día 1 de septiembre los profesores empiezan a cruzar las puertas de colegios e institutos en los que se esperan alumnos en esas fechas para exámenes de recuperación.
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A esa situación se suma, según traslada la responsables de CSIF en el ámbito educativo autonómico, la demora que se está dando en la citación de los test se seroprevalencia, con fechas que remiten a los docentes a octubre.
Esta semana será clave para despejar algunas dudas. El equipo de la consejera de Educación, Rocío Lucas, está manteniendo encuentros con los sindicatos con representación en el ámbito educativo autonómico. Castilla y León son CCOO, UGT, CSIF, STECYL y ANPE. Es la primera toma de contacto con la nueva directora de Recursos Humanos de la Consejería de Educación, María Teresa Barroso, que se estrena en la responsabilidad con el inicio del curso en el tiempo de descuento tras la dimisión de su antecesora la semana pasada.
A estas reuniones se suma la cita estatal que tendrán lugar el jueves entre responsables autonómicos y estatales de Sanidad y de Educación. «Esperamos que decidan medidas de reducción de ratios y que aclaren directrices», confía Madruga. El viernes se convocará una sectorial entre la consejería y los sindicatos del ámbito educativo para concretar respuestas a los interrogantes que la covid plantea en las aulas y avanzar la actualización del protocolo covid.
¿Qué pasará con los contagios de maestros y profesores? ¿Cómo y en cuántos días se sustituirá a los docentes que se contagien? ¿Cómo se actúa con los niños con patologías de riesgo? ¿Qué tiene que hacer el profesor cuando hay niños confinados que no están enfermos? ¿De qué manera se articula la docencia a distancia? «No se les puede dejar sin dar clase», defiende Elena Calderón, que insiste en que han pedido que se sustituyan las bajas con rapidez y que se emplee tiempo en el inicio del curso en desarrollar talleres para ahondar en la información sobre los hábitos de higiene, las mascarillas, cómo moverse por los centros.
Beatriz García, secretaria de Enseñanza de UGT Castilla y León, incide en la dificultad de aplicar lo que pone sobre el papel en distancia, ventilación o normas organizativas en los centros con más alumnado. «No es igual la zona rural que la urbana y tampoco dar clase a Bachillerato que a Infantil, no valen generalidades». García explica que la respuesta de Educación a los reparos sobre la organización del curso es remitir a que quien marca la pauta es Sanidad e insistir en que hay tiempo y todo estará «guionizado» para que «todo el mundo sepa lo que debe hacer».
Fuentes de la Consejería de Educación resaltaron ayer que el personal de riesgo se incorporará a sus puestos «siempre y cuando su situación clínica lo permita». Desde el equipo de Rocío Lucas aseguraron que van a seguir «rigurosamente las medidas de protección» y que contarán (los centros docentes) «con todo el material que precisen: mascarillas, pantallas, batas...» Por último, en caso de duda, serán los servicios de prevención lo que decidan, tras un informe que recogerá «las medidas adicionales que se puedan adoptar». También destacaron que se han contratado 600 docentes más en la pública y 200 en la concertada para facilitar desdobles de clases.
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