Secciones
Servicios
Destacamos
En un mes que tradicionalmente resulta negativo para el mercado laboral en comparación con el anterior, muy marcado por los trabajos estacionales de Navidad, la costumbre se cumplió una vez más en 2022. Castilla y León sufrió en enero un incremento de en torno al ... 1% en el número de desempleados y perdió la misma tasa de afiliados a la Seguridad Social. Sin embargo, el mes recién terminado ha sido distinto a todos los anteriores por obra y gracia de la nueva legislación laboral, que motivó un aumento de cinco puntos en la contratación indefinida, hasta representar el 15,7% del total de contratos formalizados.
Noticia Relacionada
La comunidad registra, al cierre del mes pasado, 130.069 parados inscritos en el Servicio Público de Empleo (SEPE), que son 1.300 más que en diciembre de 2021, es decir, el 1,01% más. Se trata de un incremento superior a la media nacional, del 0,55%, que deja la cifra de desempleados en 3,12 millones de personas, 17.173 más en cifra absoluta. El paro bajó en Burgos (210 parados menos) y Palencia (114); mientras que subió en las otras siete provincias, sobre todo en Soria (175, que suponen el 5,27%) y Segovia (251 más, el 4,18%). En Valladolid se incrementó en 302 inscritos (1,07%) y Salamanca, en 247 (1,24%).
La comparación interanual deja a Castilla y León con mejor balance que el conjunto de España, por cuanto los 43.834 parados menos suponen una bajada del 25,21%, frente al 21,22% nacional.
La Seguridad Social despidió enero con 922.051 afiliados en la comunidad, lo que representa un retroceso de 10.212 personas, el 1,10% frente al 1% de todo el país, donde se perdieron 197.750 ocupados, hasta los 19,62 millones. La ganancia en los últimos doce meses, de 26.141 trabajadores en Castilla y León, supone el 2,92%, frente al 4,24% de toda España.
La principal novedad de enero estuvo en la contratación. En diciembre de 2021, el número de contratos firmados en la comunidad ascendió a 66.167, de los que el 89,5% fueron de carácter temporal. El Consejo de Ministros aprobó el 28 de diciembre el Real Decreto Ley de reforma del mercado laboral, vigente desde entonces aunque pendiente de su convalidación en el Congreso de los Diputados. Supone la desaparición del contrato por obra o servicio, de modo que los contratos de duración determinada han de firmarse solo por circunstancias de la producción o por sustitución de un trabajador.
De modo que enero, de los 60.633 contratos rubricados en Castilla y León (casi seis mil menos que en diciembre, una vez pasada la temporada comercial del último mes del año), fueron temporales el 84,5%. La conclusión más evidente es que supresión de la posibilidad de formalizar contratos por obra y servicio se traduce en un repunte de cinco puntos porcentuales en la contratación indefinida, que pasa del 10,5% de diciembre al 15,7% de enero.
Noticias relacionadas
A nivel nacional ha sido el mejor mes de la serie histórica en cuanto a la firma de nuevos contratos indefinidos, excluyendo las conversiones de los temporales. Los indefinidos representan el 15% del total, lo que según destaca el Ministerio de Trabajo refleja el impulso a la contratación estable que ha propiciado el Real Decreto Ley.
En una visión histórica, los 1.300 nuevos parados del primer mes del año son la cifra más reducida desde 2018, cuando subió en 1.030 personas. Históricamente es la cuarta menor subida para un mes de enero, con un año (1991) en el que el desempleo bajó. En cuanto a la destrucción de afiliados, la pérdida del 1,1% es la más moderada desde, al menos, 2012.
El paro subió en enero solo en un sector, pero al ser el de mayor actividad fue suficiente para echar por tierra todos los demás. La comunidad registró 2.124 desempleados más inscritos como demandantes en el sector servicios, mientras que se produjeron descensos en la agricultura (319), la industria (86), la construcción (104), así como en el colectivo sin empleo anterior (315).
Enero sobresale también como el mes en que más trabajadores salieron de ERTE para volver a desempeñar su actividad laboral desde agosto del año pasado. Castilla y León tuvo el mes pasado una media de 4.634 afectados por expediente de regulación temporal de empleo, 2.743 menos que en diciembre, es decir el 37% menos.
Los autónomos presentaron 5.521 solicitudes de prestación extraordinaria por cese de actividad, de las que se resolvieron favorablemente 4.548. En este caso se trata de números muy similares a los del mes anterior.
Desde la óptica de la afiliación por secciones de actividad, una vez más la hostelería y el comercio fueron los responsables de la pérdida de inscritos en el sistema. En el Régimen General (asalariados), se perdieron 2.440 empleos en hostelería y 1.334 en comercio y reparación de vehículos. En esta ocasión, con la pandemia ya remitiendo, se registraron también 2.324 afiliados menos en la Administración Pública. La industria manufacturera destruyó 356 puestos de trabajo, las actividades administrativas y auxiliares, 941, y el sector del transporte y almacenamiento, 240.
Solo dos ocupaciones mejoran la cifra de afiliados en enero en comparación con diciembre: las del sector sociosanitario, con 417 afiliados más, y la educación, con 287.
El Régimen de autónomos (RETA) presenta un panorama desolador en enero, con destrucción de inscritos en todas las actividades salvo una, la inmobiliaria, que ganó dos afiliados. Las mayores pérdidas frente a diciembre se produjeron de nuevo en comercio (244) y hostelería (196), a las que hay sumar los 166 trabajadores por cuenta propia menos del sector de la construcción.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.