Consumo de alimentos en 2023: 25 kilos menos y 122 euros más por persona

Así se desprende del Informe del Consumo Alimentario en España 2023 que acaba de presentar el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que, de manera concreta, refleja que durante el año 2023 los hogares han reducido ligeramente en un 0,4% la compra de alimentación y bebidas para el abastecimiento doméstico mientras que el gasto crece un 9,6% como consecuencia del impacto que produce el crecimiento del precio medio, un 10,1%, que se sitúa a cierre de año 2023 en 3,01 euros/kilolitro.

En el caso de los castellanos y leoneses el gasto en alimentación supuso durante el pasado ejercicio un coste de 1.766,5 euros por persona frente a los 1.730,9 euros de media nacional, más de 35 euros por encima del conjunto nacional y un dato que coloca a la región en séptimo lugar en gasto per cápita. El consumo por habitante también es superior al conjunto del país, 585,14 kilos frente a los 574,29 kilos de media nacional. Este apartado lo lidera Baleares y Castilla y León se sitúa en octava posición. En general somos la única comunidad en la que las familias reducen el gasto.

Pero la cuestión de fondo es otra. A pesar de que cada castellano y leonés consumió el año pasado 25,45 kilos o litros de alimentos y bebidas menos que en 2022, tuvo que gastarse 121,61 euros más, lo que supone un 7,3% de incremento.

El informe ministerial, que se extiende a lo largo de casi 600 páginas, ofrece una visión mucho más concreta de los gustos de los habitantes de la comunidad y su preferencia por la carne, la fruta fresca, la leche y el resto de lácteos.

Así, cada castellano y leonés consumió de media en 2023, 48,26 kilos de carne, solo superados por los 49,21 kilos por persona de Navarra. El consumo de carne, a pesar de ser destacado, ha ido bajando en los últimos años si se tiene en cuenta que en 2021, cada vecino de la región consumió 52,22 kilos. La media nacional actual se sitúa en 41,11 kilos.

Pero se puede ir más allá. Del total de carne consumida en la región, 36,2 kilos son de carne fresca y la preferida de los ciudadanos es la de pollo, con 12,8 kilos por persona y año, seguida de la de cerdo con 12 kilos y la de vacuno con 5,2 kilos. Mucho más lejos queda el ovino y el caprino, con 1,7 kilos, o el conejo, con 0,8 kilos.

En cuanto al consumo de fruta fresca, la ingesta por persona fue de 89,22 kilos, superada únicamente por navarros y vascos. La media nacional es mucho más baja, 78,51 kilos por persona según refleja este mismo informe.

La leche y el resto de lácteos también se incluyen entre las preferencias de los castellanos y leoneses, 114,73 kilolitros por persona y año y solo superados por los 124,21 kilolitros de Asturias. La media nacional es de 97,33.

La región, además, ocupa la sexta posición en consumo de huevos, con 9,09 kilos, o la quinta si se trata de pescado, con 21,67 kilos per cápita frente a los 18,56 kilos del conjunto del país. La región está igualmente por encima de la media en consumo de pan, 31,75 kilos por persona al año, y patatas, 18,7 kilos por persona al año.

Los castellanos y leoneses, bien parados

A la vista de estos datos, el catedrático de Endocrinología y Nutrición de la Universidad de Valladolid y Jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Clínico Universitario, Daniel A. de Luis Román, comenta que los datos «son interesantes, en primer lugar, porque nos gastamos más dinero en comer». Recuerda la reciente retirada del IVA en productos como el aceite, «es una inversión en salud que estos alimentos considerados sanos bajen, aunque solo sea el IVA porque la cesta de la compra sube».

Destaca del lado positivo de los hábitos de los vecinos de la región el consumo de fruta, «no salimos mal parados como comunidad, también estamos en la parte alta en consumo de pescado».

Sobre el consumo de proteínas de origen en carnes, el consejo siempre es el mismo, primar el consumo de proteínas de pescado, leguminosas y lácteos y en el caso de las carnes «carnes más magras y menos grasas como pollo o conejo» y en el caso de las carnes rojas, que no sean procesadas.

Daniel A. de Luis recuerda aquello de que «somos lo que comemos» y reflexiona sobre el hecho de que una persona media de 70 kilos consume cada año ocho veces su peso corporal y volumen líquido. «La alimentación es muy importante, es nuestra salud».

Bebidas

En materia de consumo de bebidas, Castilla y León se encuentra por debajo de la media en todas las tipologías. El consumo en vino se sitúa en 5,7 litros por persona y año, frente a los 6,9 de la media nacional. También se encuentra por debajo en consumo de cerveza, 15,4 litros frente a los 19,3 de media nacional. En el apartado de bebidas espirituosas la media regional es de 0,67 litros y la nacional se eleva hasta los 0,75 litros por habitante.

Sobre este apartado el experto aclara que «se está virando el consumo a bebidas de alta graduación» mientras que en las pirámides alimentacias la recomentación es el vino y la cerveza por su fermentación. «Deberíamos limitar las bebidas de alta graduación y beber en un entorno de comida, con las comidas principales».

Consumo fuera del hogar

Por último, el consumo fuera de los hogares ha disminuido un 2,5 % en volumen. El gasto en alimentos (incluye aperitivos) y bebidas fuera del hogar asciende a 34.941,69 millones de euros, lo que equivale a 3.862,06 millones de kilos o litros. En promedio, cada persona consume fuera del hogar 110,73 kg/l de productos de alimentación, equivalente a 4,3 kg/l menos que el año 2022. Por tanto, existe una menor demanda de alimentación fuera de casa.

En este sentido, Daniel A. de Luis aprecia que «las comidas sociales son un porcentaje importante de la inversión en alimentos, pero bienvenido sea por celebrar», concluye, aunque reconoce que «hay que seleccionar muy bien cuando salimos de casa».