El paro baja en diciembre y Castilla y León cierra 2022 con 6.770 inscritos menos

Para relativizar estas cifras, el retroceso mensual fue del 0,76%, frente al 1,52% nacional y el del conjunto del año del 5,26%, por debajo del 8,64% de todo el país. Peores registros, pues, que en toda España en lo que puede ser la última bajada del paro durante algún tiempo, a tenor de todas las previsiones. Peores también que los de 2021. Castilla y León despide 2022 con 121.999 parados apuntados al SEPE, en un ejercicio en el que los datos fueron más a menos con los meses y los acontecimientos.

Con la creación de empleo sucede algo parecido. En este caso, la afiliación desciende en diciembre, en 1.859 personas que se suman a las 5.500 de noviembre, lo que deja la ganancia anual de 2022 en 8.216 afiliados. Al igual que sucede con el paro, la afiliación muestra peor evolución en la comunidad: la pérdida mensual es del 0,20%, triple que el 0,06% nacional; y la mejoría anual es del 0,88%, más débil que el 2,38% de todo el país.

El paro bajó en diciembre en todas las provincias salvo Zamora y Palencia y descendió sobre todo en Salamanca y Segovia. En el conjunto del año, el desempleo desciende en todas salvo Zamora, que termina con dos parados más de los que tenía al principio. Las mayores bajadas anuales se dan en Palencia, del 9,6%, con Burgos, León y Valladolid por encima del 6% de bajada.

En el último mes del año, el desempleo cayó en el sector servicios en 1.401 personas, en 29 en la agricultura y en 138 en el colectivo sin empleo anterior. Subió en la industria, 89 personas, y más preocupantemente en la construcción, con 542.

En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, las provincias de Salamanca, Ávila y Valladolid ganaron inscritos en diciembre y los perdió, sobre todas las demás, Segovia. En el conjunto de 2022, la que más afiliados gana es Soria, ya que apenas 578 suponen el 1,45%. El resto rondan el 1% salvo Zamora y Segovia, en el 0,3%.

De esta manera, el mercado laboral de la comunidad cierra un ejercicio que termina de una forma más parecida a cómo acabó 2019 (en vísperas de la pandemia), con signos de agotamiento en la creación de empleo y la lucha contra el paro, que a cómo se despidió 2021 (tras pasar lo peor de la covid), cuando hubo una fuerte mejoría.

En términos anuales, el desempleo bajó prácticamente el doble entre el colectivo masculino que entre el femenino. Las oficinas de empleo de Castilla y León registraron un descenso de 4.223 parados entre los hombres (7,76%, hasta dejar el total en 50.185) y de 2.547 paradas en el colectivo femenino (3,43% menos, hasta 71.814 desempleadas).

El paro registrado en la comunidad disminuye mensualmente en la agricultura (0,50%), en el sector servicios (1,60%) y en el colectivo sin empleo anterior (1,17%) y aumenta en la industria (0,88%) y en la construcción, (7,16%). En comparación con un año atrás, la bajada alcanza a la agricultura (28,59%), la industria (11,65%), la construcción (7,56%) y en el sector servicios (3,20%), con aumento en el colectivo sin empleo anterior (3,75%).

Desde el punto de vista del empleo, las actividades que mejor se han comportado en 2022 en Castilla y León son las recreativas y de ocio, con un repunte del 7,2%; seguidas de la educación, con el 3,7% y las actividades profesionales, científicas y técnicas, con el 3%. En cifras absolutas, las mayores generadoras de puestos de trabajo son las sociosanitarias (2.776), seguidas de la industria manufacturera (2.439), la hostelería (2.057) y la educación (2.108).

Los peores registros anuales de afiliación son para las actividades financieras, con un 3,4% menos de inscritos y la administración pública, con el 3% y 1.777 afiliados menos. Otros 1.399 perdió el sector del comercio y reparación de vehículos. El mes de diciembre, comparado con noviembre, fue malo para la construcción (1.040 afiliados menos) y las actividades administrativas (1.300) y bueno para el sector sanitario y de servicios sociales (999 más) y el comercio, por la campaña de Navidad (663).

El colectivo de trabajadores autónomos dice adiós a un pésimo ejercicio en Castilla y León en el que perdió la barrera de los 190.000 integrantes. Sus 187.980 afiliados al RETA al cierre de diciembre suponen 533 menos que en noviembre (0,28% frente al 0,03% nacional) y 2.487 menos que en diciembre del año anterior (1,31%, por el 0,0% de todo el país).

Por lo que respecta a la contratación, en diciembre de 2022, en Castilla y León se han registrado 46.196 relaciones laborales, de las cuales 13.852 son indefinidas (29,9%, el doble que el año anterior). Ahora bien, en toda España la tasa de contratos indefinidos alcanza el 39%.

A nivel nacional, del total de contratos indefinidos suscritos en el último mes del año, 179.000 fueron a tiempo completo, un 62% más que doce meses antes; 178.000 fijos discontinuos, el 964% más, y 107.000, indefinidos a tiempo parcial, el 127% más. En la comunidad hay en este momento 121.999 parados registrados en el SEPE, a los que se suman (no contabilizados como desempleados) otros 29.725 demandantes de empleo que están ocupados y 10.715 demandantes con disponibilidad limitada. Entre estos colectivos se encuentran los fijos discontinuos durante los periodos de tiempo en los que no están trabajando.

Por otro lado, Trabajo ha informado además de que el número de beneficiarios de prestaciones por desempleo en Castilla y León en el mes de noviembre de 2022 fue de 71.786, el 3,5% más que en octubre y el 0,14% menos que en noviembre del año anterior. La cuantía media de prestación contributiva por beneficiario se situó en 876,52 euros, frente a los 916,55 de España.