Consulta la portada del periódico en papel
García-Gallardo, este miércoles en el Pleno de las Cortes. El Norte

Castilla y León

Acusan a Gallardo de hacer el gesto de una felación a dos procuradoras socialistas

El vicepresidente defiende que ha hecho una mueca de «lloriquear» y los partidos políticos piden las imágenes

Antonio G. Encinas

Valladolid

Miércoles, 8 de noviembre 2023, 11:49

El Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes de Castilla y León ha denunciado el gesto de una felación que el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo (Vox), ha realizado supuestamente a dos procuradoras del PSOE este miércoles por la mañana, en el transcurso de ... la segunda sesión del Pleno.

Publicidad

Carlos Pollán, presidente de las Cortes, pidió un receso en el Pleno matinal de este miércoles. E instó, según algunos de los procuradores presentes, a que todos se comportasen a la vuelta. En ese momento ya se había desatado la bronca por un gesto de Juan García-Gallardo (Vox) durante la intervención del socialista Diego Moreno. Según la bancada del PSOE, situada justo enfrente del vicepresidente de la Junta, hizo por tres veces el gesto de una felación dirigido a las parlamentarias Nuria Rubio y Patricia Gómez Urbán. Según García-Gallardo, fue un gesto de «lloriqueo» porque, a su entender, el PSOE se pasa el día llorando en el hemiciclo. Los dos partidos solicitaron las imágenes de vídeo para apoyar sus versiones, sin que hasta el momento hayan trascendido.

A la vuelta del receso, la bronca no se redujo, sino que se incrementó, como era de prever. Pidieron intervenir tanto García-Gallardo como Tudanca y a Carlos Pollán se le fue el debate de las manos. Llamó al orden dos veces al de Vox y dos veces al socialista. Comenzó con el turno de palabra el vicepresidente de la Junta. «Si tuviera que recurrir en cada pleno al artículo 76 para contestar a las alusiones inexactas sobre mi conducta o mi persona estaría todos los días haciéndolo. Es la segunda vez en año y medio los que denota la paciencia constante que he tenido», comenzó. «Hemos visto al señor Igea (ex Ciudadanos) tirarle los papeles al procurador de Vox que tiene delante, a Pablo Fernández (Unidas Podemos) decir todo tipo de barbaridades, y al PSOE haciendo aspavientos y sin ni siquiera saber sentarse en la silla correctamente», remató, en alusión a Ana Sánchez, vicepresidenta de las Cortes.

Gallardo incluso pidió «una reflexión al presidente de las Cortes», de su partido, Carlos Pollán, sobre el uso que hace de las llamadas al orden. «Niego rotundamente lo que se me achaca. Lo que he hecho es un gesto de llorar, es un gesto así -y se llevó el puño al ojo y lo giró repetidamente-, porque son unos llorones y es patético, ridículo, vergonzoso, que ustedes quieran tapar la gran traición del PSOE a esta tierra al Estado de derecho con…». Y hasta aquí. Desde ese punto todo se volvió ininteligible, con la bancada socialista protestando, Francisco Igea puesto en pie gritando «¡ya está bien!», ruido en todo el hemiciclo y Pollán llamando al orden por dos veces al vicepresidente, que seguía con su discurso elevando la voz, aunque no se entendiera nada.

Pasó el turno a Luis Tudanca, que comenzó más sereno. «Ese artículo del reglamento habla de los ataques a la dignidad de un grupo parlamentario y se ha atacado una vez más a la dignidad de este grupo, de las mujeres, de este parlamento y de los castellanos y leoneses, y nos vemos obligados a defender esa indignidad frente al PP y a Vox», comenzó. Y a partir de ahí elevó el tono para reclamarle a García-Gallardo que «habría sido mejor que se levantara y pidiera perdón, como tantas veces que ha perdido el respeto» a los socialistas. Habló de «obsesión» por atacar «a las mujeres» y comenzó a argumentar que «los que les han parado y les volverán a parar, a los fascistas, franquistas y al PP, serán las mujeres de este país».

Publicidad

En ese punto Carlos Pollán decidió que terminaba su turno. «Señor Tudanca, no tiene la palabra». Lo que dejó a Luis Tudanca atónito. Tanto, que su respuesta, por espontánea, provocó la carcajada en el PP. «¿Porque usted lo diga?». Y añadió: «El señor vicepresidente ha hecho un gesto obsceno, usted no puede permitir que esos gestos machistas se den en este parlamento», insistió. Y Pollán le llamó al orden. Dos veces. Y Tudanca siguió hablando, y la bancada del PSOE se puso en pie para aplaudirle, y se le apagó el micrófono. Pero Tudanca siguió, con la voz amortiguada sin micro. «Si usted es capaz de echarme por defender la dignidad de las mujeres será usted el responsable, señor Pollán».

Y no hubo un tercer aviso, así que ni Tudanca ni Gallardo se fueron a la calle por eso. El vicepresidente sí abandonó el hemiciclo poco después. Tudanca se quedó para discutir la jugada con las dos parlamentarias que denunciaron el gesto, Rubio y Gómez Urbán, y luego salió.

Publicidad

Patricia Gómez Urbán (PSOE) denuncia que «no es la primera vez» que hace el mismo gesto, «pero esta vez se recreó»

El fin del esperpento se dio cuando Francisco Igea pidió intervenir. Pollán le preguntó que en virtud de qué artículo, aunque el propio presidente de las Cortes había preguntado previamente si alguien más quería intervenir. «Ha preguntado usted», le recordó Igea. «En base al artículo que nos permite llamar al cumplimiento del reglamento, al 76,13», respondió. Y Carlos Pollán remató con un «vamos a acabar con esto, intervenga rápido y finalizamos». Igea: «Muy rápidamente». Luis Tudanca, desde el escaño: «¿Tiene algo más importante que hacer, señor presidente?». Igea: «Vergüenza me da lo que ocurre aquí y más los aplausos del PP». Fin de la intervención. Y Pollán, como Mateu Lahoz, indicó que siguiera el Pleno sin más. Como diría el trencilla vallisoletano Santamaría Uzqueda, «jueguen, jueguen». Y Tudanca, encrespado: «¿No piensa hacer nada?». Y la respuesta, por omisión, fue que no.

El PSOE convocó de urgencia entre votaciones para exponer su versión de los hechos. Unos hechos que, según explicaron Luis Tudanca y Patricia Gómez Urbán, se han repetido en otras ocasiones. «No es la primera vez que pasa. Nosotras llevamos aguantando mucho en este parlamento. Son reiteradas las veces que nos ha hecho este gesto y a veces lo ha acompañado con las palabras 'a mamarla'. Y lo hace en sede parlamentaria. Y nosotras miramos para otro lado porque estamos en sede parlamentaria. Pero hoy se ha recreado. Por tres veces. A la segunda le ha dicho Ángel Hernández '¿qué haces?' y se ha reído y lo ha vuelto a hacer», explicó la parlamentaria socialista.

Publicidad

El PSOE responsabiliza a Mañueco

Para Tudanca, Carlos Pollán «ha perdido el control» de la Cámara, pero los socialistas insistieron en cargar con la responsabilidad de estas acciones a Alfonso Fernández Mañueco, «cómplice» de las actitudes de Juan García-Gallardo «por nombrarle vicepresidente de la Junta». Y añadió: «El ambiente es irrespirable. El daño a la institución es insoportable. Cualquier acuerdo debe pasar por echar a Vox del Gobierno, ya se lo he dicho [al señor Mañueco]. Lo más doloroso es escuchar las risas del PP, ver los aplausos. Porque radicales habrá siempre, lo que nunca hubo desde 1978 es un partido de Gobierno que los jalea, los mete en los gobiernos, alienta manifestaciones contra otro partido democrático. Les estoy escuchando cantar el 'Cara al sol', vivas a Franco, leer amenazas de muerte, que acosen a los hijos de compañeras del partido a la salida del instituto…», relató Tudanca al respecto de lo ocurrido en los últimos días.

Tudanca incluso aseguró que «miembros de la Mesa de las Cortes, de PP y Vox, así como de la bancada del PP y de otros grupos políticos», habían confirmado el gesto obsceno del vicepresidente de la Junta.

Publicidad

García-Gallardo insiste en su versión

Juan García-Gallardo, mientras tanto, insistía en defender su versión a través de las redes sociales. «Si la prensa colaboradora del golpe [de Pedro Sánchez] tiene pruebas de sus acusaciones falsas, que las saquen. Y si no, que dejen de mentir o tendré que reaccionar ejerciendo mis derechos». Y anunció que esta tarde de miércoles volverá a manifestarse ante una sede del PSOE, en este caso la de Valladolid. El martes estuvo en Tordesillas, en la única concentración de este tipo convocada por un miembro del PP, el alcalde Miguel Ángel Oliveira. El lunes participó en la concentración frente a la sede de Ferraz, en Madrid, y el domingo hizo lo propio en un acto contra la amnistía celebrado en Burgos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad