Delicioso pulpo a la plancha en «uno de los bares más cotizados» de La Rondilla

Basta con observar unos segundos desde la calle del Soto el escaparate del bar El Cardenal para comprender que es un local que cuenta con al aprobado de decenas de vecinos del barrio de La Rondilla. Desde primera hora del día, sus puertas ya está abiertas para servir una oleada de desayunos para ayudar a empezar el día con fuerza a los vallisoletanos más madrugadores. El encargado de este proyecto es Jorge Gutiérrez que, gracias a su gran trabajo, se ha ganado el cariño de muchos de sus clientes.

«Estos chicos funcionan de maravilla, a lo mejor en un día te sirven 70 u 80 desayunos» explica un vecino de La Rondilla que acude todos los días a leer el periódico y a tomar el vermú sentado en la barra. Y es que el bar cuenta con una amplia plantilla que trabaja para servir desayunos, tapas, comidas y cenas a diario. «Yo llevo toda la vida en la hostelería, me he formado desde muy joven y ahora llevo siete años trabajando en este barrio» asegura Jorge Gutiérrez mientras se dispone a preparar uno de los platos más cotizados de El Cardenal.

«Cuento con una plantilla amplia porque tenemos muchos clientes desde primera hora del día» explica contento por lo bien que está funcionando su último proyecto. Y si bien la carta es amplia, pues hay desayunos, una gran variedad de hamburguesas y raciones para compartir, Jorge ha puesto ya a tono su plancha para preparar un delicioso pulpo que cuenta con varias elaboraciones y que «es uno de los platos que más me pide la gente» asegura.

Y no es de extrañar, pues solo con ver su aspecto aún sin cocinar ya apetece llevarse un trozo a la boca. «El pulpo ya viene cocido y nosotros le ponemos a la plancha con un par de patatas para acompañar como guarnición» explica. Mientras echa un buen chorro de aceite, su compañero comienza a preparar el emplatado. Aquí es donde está la magia del plato, pues además de ser contundente y delicioso, también es muy vistoso.

Sobre la base echan un poco de parmentier, especialidad gastronómica francesa. Se trata de un gratinado a base de capas de puré de patatas y que se utiliza a menudo para elaborar platos con pulpo. Para las patatas, añaden mojo picón, una salsa típica de las islas Canarias que se utiliza para recetas clásicas de la zona como las papas arrugadas. Al juntar el pulpo a la pancha marcado para que sea más sencillo de hacer los cortes junto con la guarnición y las salsas, el resultado es un conjunto de sabores exquisitos que han conquistado los paladares de los vecinos de La Rondilla y sus alrededores.

«Yo voy a muchos bares del barrio y este es el que está mas lleno siempre» dice otro de sus clientes más habituales mientras se sienta en una mesa con una carta y elige uno de los platos de El Cardenal.

Apasionado de su trabajo y enamorado de La Rondilla, el barrio de sus abuelos, el proyecto de Jorge Gutiérrez va viento en popa, cuenta con el aprobado de los vecinos y sus platos son ya imprescindibles para los cientos de clientes que acuden a diario a este pequeño rincón situado en la calle del Soto.

• Temas
• Comer y beber en Valladolid