La receta

Carquinyolis de almendra

Típico en Cataluña su consumo se ha extendido por el resto del país. De origen incierto, se han encontrado referencias de estos biscotes de mediados del S.XIX aunque se cree que las primeras referencias llegaron de la Edad Media.

En cualquier caso, disfrutar de estas pastas de almendra elaboradas de forma casera no lleva mucho tiempo, ni complicaciones. Y aunque dependiendo de cada zona, las cantidades y la forma de elaborarlas puede variar ligeramente, el resultado son unos carquinyolis crujientes.

En un bol se hecha la harina tamizada. A continuación, las almendras y los huevos a temperatura ambiente. Para incorporar la mantequilla antes hay que derretirla en el microondas. El siguiente en sumarse es el azúcar y un poco de levadura. Una vez están todos en el recipiente, con una cuchara de madera se van mezclando.

A medida que se remuevan se irá formando una masa a la que se acabará de dar forma con las manos. Una vez se le de forma de bola, se corta y se divide en dos o tres partes. Cada una de ellas se trabaja para hacer un cilindro y se coloca sobre papel de horno en la bandeja.

Se hornea durante media hora a 180º y se saca. Se cortan en forma diagonal para darle la forma de carquinyol y de nuevo se hornea durante diez minutos más. Luego solamente hay que sacarlos y dejar que se enfríen para poder disfrutarlos.