Sobre el cisma de Belorado: «Estamos ante un delirio inducido»

Desde que estalló el terremoto religioso con el cisma de las monjas de Belorado, han sido muchas las teorías vertidas sobre el verdadero origen del conflicto y de la ruptura con Roma. Sin embargo, hasta ahora, no se había mirado desde una perspectiva médica. Y esta es, precisamente, la que ha ofrecido el psiquiatra José Carlos Fuertes a través de su canal de Youtube donde, aunque insiste en que se trata solo de su opinión y no de un diagnóstico, no deja de ser una visión profesional, según recoge Burgosconecta.

Fuertes explica que en toda la historia, desde el punto de vista psiquiátrico, observa «aspectos muy llamativos» y cree que lo que ha ocurrido en Belorado es un «delirio contagiado». Por un lado, el supuesto obispo Pablo Rojas (el -de- se lo puso él mismo) un personaje de lo más novelesco, podría, en opinión de este psiquiatra, padecer «un trastorno delirante», enfermedad que afecta al contenido del pensamiento y que «le hace creer firmemente que tiene una capacidad y una facultad superior creyéndose irrebatible a cualquier razonamiento lógico».

Para el facultativo, Rojas podría presentar una idea de superioridad que le hace creer de verdad que está llamado a salvar la auténtica Iglesia y que lleva al supuesto obispo a despreciar a la conciliar y a toda su curia incluido el papa, contra el que ha proferido descalificaciones continuamente.

Además, Fuertes argumenta que las personas con ideas delirantes «tan fuertes y contundentes y que no son absurdas, o sea, que guardan coherencia, pueden ser contagiadas». Y aquí entrarían en escena las monjas ya excomulgadas de Belorado, puesto que se trata de un «entorno vulnerable» que, según este doctor, se debe a que son monjas de clausura, «dedicadas a la vida contemplativa que llevan toda la vida realizando labores pero sin mucho contacto con la comunidad o el entorno, lo que hace de ellas personas fácilmente influenciables y manipulables».

Desde este punto de vista, el psiquiatra afirma que el arzobispo de Burgos, Mario Iceta, debería tratar de ver lo que está ocurriendo «como una alteración psíquica». Fuertes reconoce estar convencido «de que son buenas personas con una creencia religiosa muy intensa y que esto es un contagio, no estamos ante personas rebeldes ni díscolas, sino ante un grupo de personas manipuladas, seducidas y persuadidas por un sujeto que se cree que está llamado a una renovación y que va a poner orden en la actual Iglesia católica».

Su conclusión, en esta línea, y matiza que al margen de litigios y cuestiones inmobiliarias o económicas, es que se debe pensar «en un grupo de personas alteradas por un trastorno de la personalidad importante quelas lleva a ser rebeldes sin causa». Y añade que, como psiquiatra, cree que lo que está ocurriendo en Belorado es un caso de «delirio inducido».

• Temas
• Iglesia Católica
• Belorado
• Burgos (Provincia)
• psiquiatría