Balones y mascarillas, las adaptaciones en el deporte profesional tras la covid

La covid-19 marcó un antes y un después en todas las entidades deportivas y competiciones a nivel internacional, pero también nacional. Ha sido justo ahora, cuando se cumplen cinco años del inicio de la pandemia en España y del confinamiento, con la posterior paralización de la vida -y por supuesto del deporte- cuando clubes como el Atlético Valladolid admiten que comienzan «a recuperar números prepandemia», valora el presidente del club de Huerta del Rey, Mario Arranz, para referirse a volumen de socios y capacidad presupuestaria.

El agujero de la covid paralizó e, inclusó, retrocedió el avance de los clubes deportivos vallisoletanos. En el Estadio José Zorrilla lo saben bien, y el propio David Espinar, portavoz y director del Gabinete del Presidente del Real Valladolid, señaló a la pandemia como lo peor que le había ocurrido al Pucela en su periodo como dirigente blanquivioleta.

De aquellos días de confinamiento, test masivos, permisos -casi judiciales- para moverse, franjas horarias exclusivas para deportistas y por segmentos de edad, hay protocolos que no desaparecieron con la mitigación de la enfermedad. Patrones que se quedaron en los equipos como «mejoras» o como una normalización del día a día, con la mascarilla como evidencia más clara.

La mascarilla ha pasado a formar parte del botiquín de todos los servicios médicos. Es más, en un deporte colectivo, como lo son el fútbol, el baloncesto, el balonmano o el rugby, por poner los ejemplos más profesionalizados en Valladolid y en Castilla y León, cada deportista de forma individualizada, debe estar lo suficientemente responsabilizado, para saber que debe utilizarla en espacios comunes al más mínimo síntoma de covid, así como descartar la posible enfermedad con test víricos.

En el Real Valladolid, desde el área de Salud, no ha habido grandes cambios tras la pandemia de la covid-19. «Sí es verdad que se ha normalizado el uso de la mascarilla», valoran desde este departamento. «Si hay un futbolista con sintomatología, aunque no sea de la covid, se utiliza para evitar contagios», valoran de acuerdo «a las recomendaciones de las autoridades sanitarias».

En este sentido, se señala que más que la covid, lo que crea más estragos en estos días es la gripe.

En el aspecto organizativo, en el caso del Pucela, sí ha habido una implantación importante tras la pandemia, como lo es en el caso nutricional. Durante los peores meses de la enfermedad se implementó el servicio de cocina en el etadio, con comida siempre para llevar, y ese servicio se ha mantenido. «Supone una gran beneficio nutricional, y se ha habilitado el comedor para desayunar, comer, llevar la cena, y mejorar la convivencia entre los futbolistas», se valora desde la entidad blanquivioleta.

También en clave blanquivioleta está la normalización de las pautas individualizadas de trabajo, pre y post entrenamiento en el estadio y en casa. «Durante la pandemia se hacían de forma solitaria en casa, se demostró que era beneficioso para el tema de prevenir lesiones, para hacer propiocepción... Y se quedó como fórmula de trabajo. Antes de la pandemia solo se hacía de forma residual».

En este sentido, desde el Real Valladolid se recuerda que durante la pandemia no se podía entrar en el vestuario y las activaciones se hacían en los hoteles o en el estadio antes de desplazarse al lugar de competición, y ahora esta práctica se ha implementado y se realiza siempre.

También desde el departamento de comunicación del club se habla de cómo se ha potenciado el uso del vídeo, y el uso de la vídeo entrevistas, cuando antes era un formato en desuso, incluso mál visto. «Ahora se ha hecho por ejemplo de forma generalizada tras el fichaje de Tamas Nikitscher con medios húngaros».

Desde el Recoletas Valladolid, además de las recomendaciones de las autoridades sanitarias, también se valora que el acceso a las pista durante los partidos oficiales se ha prohibido a todo personal ajeno a la competición. «Antes podía acceder periodistas, fotógrafos... En la pandemia se prohibió y se ha mantenido en el tiempo», concluyen.