Hallado sin vida el piloto de la avioneta que desapareció en Zamora

Junto a la aeronave siniestrada, los efectivos del Greim -el Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil- desplazados hasta la zona han encontrado el cuerpo sin vida del piloto, Santiago Durán, sevillano de 36 años. «Dada la dificultad de acceso, la Guardia Civil está gestionando el rescate del cadáver, que será trasladado al Instituto Anatómico Forense de Zamora», ha explicado Barcones, al tiempo que ha trasladado sus condolencias a familiares, amigos y compañeros de trabajo del piloto fallecido y ha agradecido «la implicación y solidaridad de todas las personas implicadas en la búsqueda».

En estos momentos se investigan las circunstancias en las que se produjo el siniestro, en colaboración con la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil y bajo la tutela del Juzgado de Instrucción de Puebla de Sanabria. Este mismo viernes por la mañana, la representante gubernamental en la comunidad confirmó que la baliza de emergencias de la avioneta no se activó.

La compañía, a través de un comunicado, mostró su «colaboración absoluta con las autoridades en las investigaciones abiertas» y agradeció «las muestras de cariño y la implicación, dedicación y profesionalidad de todos aquellos que han trabajado denodadamente en las labores de rescate de nuestro compañero». «Nuestras prioridades en estos momentos se centran en el cuidado y apoyo a la familia de nuestro compañero», señalaron, al tiempo que destacaron la «gran experiencia en la extinción de incendios» que tenía Durán.

El alcalde de la localidad sevillana de Gines, Romualdo Garrido, ha lamentado el «auténtico mazazo» que supone para el municipio, donde Durán residía. «Todos manteníamos la esperanza hasta el último momento, siendo esta una noticia que hubiéramos deseado no dar nunca», ha señalado el regidor. En señal de luto, las banderas del Ayuntamiento de Gines ondearán a media asta.

La avioneta, un monoplaza Thrush 710P de cuatro años de antigüedad y con matrícula EC-MXL, se encontraba realizando un vuelo de traslado el miércoles desde las 11:35 horas entre la base de Doade (Monforte de Lemos, Lugo) y la base de Córdoba, pero las malas condiciones climatológicas hicieron que el piloto decidiera regresar al punto de partida. La última comunicación que la empresa Prysa, la propietaria, tuvo sobre el paradero de la avioneta fue a las 12:30 horas de ese mismo miércoles.

La búsqueda se inició en la superficie triangular con vértices en Lubián (Zamora), A Gudiña (Orense) y la provincia de León que, posteriormente, se amplió para conformar un trapezoide que se extendía hasta Portugal, con una superficie total aproximada de 180 kilómetros cuadrados.

El operativo de búsqueda incluyó, por parte de la Guardia Civil, helicópteros, patrullas de Seguridad Ciudadana, agentes del Seprona, un equipo Pegaso y un dron, así como una avioneta del SAR del Ejército del Aire, además de helicóptero y varios agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León y, ya en la jornada de hoy, una treintena de vehículos y brigadas forestales de refuerzo procedentes de Galicia.