Unas 4.000 personas se han manifestado este jueves en la convocatoria de la plataforma «La Culebra no se calla» en Zamora para exigir responsabilidades políticas, empezando por el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, «por su negligencia en la gestión del incendio de la Sierra de la Culebra», y en homenaje a los dos fallecidos en Zamora, el bombero forestal Daniel Gullón y el pastor Victoriano Antón.
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Es la segunda concentración multitudinaria que tiene lugar en la capital zamorana para mostrar el desacuerdo con la gestión de los graves incendios que han asolado la provincia, con más de 60.000 hectáreas quemadas.
La protesta, que había sido convocada por la plataforma «La Culebra no se calla», con el apoyo de la Coordinadora Por la Sierra de la Culebra; ha recorrido la distancia que separa la plaza de la Constitución y la plaza de la Marina, frente al edificio de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León.
Bajo el lema «Zamora Arde. El Gobierno de la Junta responsable», miles de personas han hecho sonar silbatos, carracas y hasta una motosierra; han coreado gritos de «Mañueco dimisión», «más bomberos, menos consejeros», y han asegurado haberlo perdido casi todo.
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También se ha recordado con un minuto de silencio a las dos personas que perdieron la vida en el incendio de Losacio y a las que resultaron heridas.
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En un manifiesto leído por integrantes de la plataforma «La Culebra no se calla», formada por vecinos de municipios afectados, han exigido más medios, más personal y mejores condiciones laborales para los trabajadores forestales y que el operativo preventivo y de extinción sea público al cien por cien, funcione todo el año y sea acorde a los nuevas condiciones climáticas.
También han solicitado el desarrollo del Estatuto Básico del Bombero Forestal, con mejores condiciones de trabajo para el colectivo, y el incremento del empleo público dedicado a la conservación y el cuidado de la naturaleza y los espacios protegidos.
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Los incendios forestales dan una tregua a Castilla y León. Según se desprende del último parte de la Junta, la comunidad aún tenía este jueves cuatro fuegos en nivel 1. Es el caso de Monsagro (Salamanca); los de Losacio y Losacino, en Zamora;y en Quintanilla del Coco (Burgos). En este último, el sistema Copernicus desveló que las llamas arrasaron aproximadamente con 2.540 hectáreas. Cabe destacar que este jueves Palencia y Soria fueron las dos únicas provincias sin incidentes.
Han pedido además la declaración como Zona Catastrófica para el conjunto de los municipios afectados, así como el seguimiento y control del plan de recuperación ambiental y socioeconómico por un comité formado por expertos, trabajadores forestales y colectivos afectados.
Además, han advertido que el verano no ha acabado y la sequía tampoco. «Todavía quedan montes y bosques en Zamora, pero debemos detener cuanto antes esta especie de maldición que nos persigue como uno de los territorios más calcinados de España», han defendido.
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