Ciencia Este ratón genera pelo humano
La última apuesta para derrotar a la calvicie se ha realizado en California: han reprogramado células madre para que produzcan pelo humano y las han trasplantado a ratones. El resultado anima a los millones de calvos del mundo. Pero no es tan fácil, otros científicos ponen pegas a esta llamativa solución a la calvicie.
Este ratón puede cambiar la vida a los calvos; y son muchos: un 42 por ciento de los españoles (la mayoría varones), según un estudio realizado por Aderans, fabricante de pelucas japonés. Investigadores de todo el mundo llevan años buscando la fórmula mágica para que
Este ratón puede cambiar la vida a los calvos; y son muchos: un 42 por ciento de los españoles (la mayoría varones), según un estudio realizado por Aderans, fabricante de pelucas japonés. Investigadores de todo el mundo llevan años buscando la fórmula mágica para que nazca nuevo pelo. Ahora aseguran haber dado con la solución: trasplantar células madres reprogramadas.
El mechón que brota en el costado de este ejemplar de ratón calvo se debe a que le han trasplantado células reprogramadas capaces de producir pelo humano. Suena prometedor. El biólogo Ernesto Lujan, fundador de la start up médica dNovo, afirma que su empresa puede producir los componentes de los folículos pilosos, mediante la reprogramación genética de células simples. Es decir, que pueden tomar células de sangre o de grasa y transformarlas en las células madre que generan pelo en los folículos capilares.
Sostiene Lujan –en una entrevista concedida al MIT Technology Review– que pueden lograr la generación de pelo cambiando los patrones de genes activos de la células.
Aseguran que pueden tomar células de la sangre o la grasa y transformarlas en células madre que generan pelo en los folículos capilares
La reprogamación podría ser una solución esperanzadora también para distintas patologías. Ya se ha intentado. Un equipo japonés probó curar la ceguera trasplantando células de retina a invidentes. Y la empresa estadounidense Vertex Pharmaceuticals anunció que podría haber curado la diabetes tipo 1 de un hombre con células beta reprogramadas. No han obtenido el éxito esperado.
No es fácil: una de las principales dificultades –apuntan los expertos– es colocar con éxito después en el cuerpo lo que se ha manipulado en el laboratorio.
Los progresos en el conocimiento de las células madre han disparado las posibilidades desde que en la primera década de los años 2000, investigadores japoneses encontraron la fórmula para convertir tejidos en células madre. Se estudian todo tipo de milagros con este hallazgo, como vencer al envejecimiento o multiplicar la fertilidad.
El quid de la calvicie está en los folículos capilares. Nacemos con unos cinco millones de ellos. Son los que son, no aumentan. Y pierden eficacia: el envejecimiento, el cáncer, la testosterona, la herencia genética, incluso la COVID-19 pueden matar las células madre que se encuentran en su interior y que producen el cabello.
Pero hay científicos que frenan el entusiasmo de estos últimos experimentos. Uno de ellos es Paul Knoepfler, biólogo especialista en células madre de la Universidad de California en Davis: «Hay que tener cuidado con las ofertas fraudulentas», ha advertido.
El mismo fundador de Stemson ha enfriado las expectativas. En su discurso durante la Cumbre Mundial sobre Pérdida del Cabello, que se celebró el año pasado, dijo: «Hemos visto a muchos asegurar que tienen la solución a la calvicie. Nosotros somos verdaderos científicos y es arriesgado garantizar que vaya a funcionar».
Ha habido tantas 'curas' fraudulentas que a mediados de la década de 1980, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), prohibió todo medicamento que asegurara tratar la caída del pelo.
«Hemos visto a muchos asegurar que tienen la solución a la calvicie. Nosotros somos verdaderos científicos y es arriesgado garantizar que vaya a funcionar», dice el ceo de Stemson, dedicada a la investigación capilar
Los calvos no se rinden. Cada año se gastan 8.500 millones de dólares en el mundo en tratamientos de todo tipo. Muchos peregrinan a Estambul, capital del trasplante capilar con unas 300 clínicas especializadas. Allí viajan unos 60.000 hombres al año para trasplantarse folículos pilosos en las zonas despobladas de la cabeza.
También se pueden realizar estos trasplantes de folículos en España; cuesta entre 2000 y 3000 euros, el precio varía según la extensión de la calvicie a cubrir.
Si la fórmula de la reprogramación celular funciona, sería una buena noticia para los calvos y un negocio redondo.
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