De 'wearables' a consolas 'vintage': la carta a los Reyes Magos de los más 'tecnológicos'

¿Tu padre nunca encuentra las llaves del coche? ¿Alguna de tus amistades acostumbra a dejarse el paraguas en cualquier sitio? Necesitan una de las balizas de localización comercializadas por marcas como Apple, Samsung o Tile: se acoplan a cualquier objeto (llaveros, bolsos y maletas inclusive) y se comunican con nuestro smartphone a través de una aplicación. Basta abrirla para conocer la ubicación de nuestras posesiones más preciadas.

Otra idea inteligente son las carteras magnéticas con geolocalización diseñadas para los modelos de iPhone compatibles con MagSafe: permiten almacenar hasta tres tarjetas y envían una notificación al desacoplarse, evitando que perdamos el DNI o el abono del Metro.

Después de las freidoras de aire llegan los modelos de doble cesta con pared divisoria, ventana transparente y accesorio para asados, de hasta 9 litros de capacidad.

También acertaremos con unos robots de cocina cada vez más versátiles y económicos; o con unas básculas inteligentes que registran el peso de los alimentos en su propia app móvil, ofreciéndonos consejos de nutrición para conformar una dieta lo más saludable y acorde a nuestros objetivos.

Todos tenemos a ese amigo que siempre va a la última: gadget vanguardista que se lanza al mercado, aparato que compra sin dilación. En esta categoría (siempre que estemos dispuestos a rascarnos el bolsillo) encontramos gafas inteligentes como las RayBan de Meta, capaces de capturar fotos y vídeos con nuestra perspectiva gracias al par de lentes incorporadas en las patillas. También permiten escuchar música o atender llamadas sin auriculares, de forma discreta.

Los visores de realidad virtual son otra buena opción para reproducir estos vídeos subjetivos (o los que capturemos con el teléfono, también referidos como 'espaciales') y revivir algunos de nuestros recuerdos más entrañables.

Los 'wearables' o dispositivos que llevar puestos han encontrado todo un filón en el segmento deportivo. Las pulseras de monitorización y los relojes inteligentes son ya un clásico por estas fechas: monitorizan nuestro tiempo de sueño y un sinfín de disciplinas deportivas, lo que nos ayuda a mantenernos en forma día tras día.

A quienes no tengan tiempo de ir al gimnasio, no obstante, les vendrá de perlas una cinta para correr o caminar desde casa. A priori puede parecer un regalo caro y voluminoso, pero lo cierto es que están disponibles desde un centenar de euros y con un formato contenido (pueden plegarse y guardarse cómodamente bajo la cama). Las pistolas de masaje también están ganando popularidad, de cara a quienes suelen ejercitar la fuerza y necesitan descargar sus músculos.

No todo el mundo puede gastarse medio millar de euros en los últimos modelos de PlayStation y Xbox, pero el segmento del videojuego alberga opciones más asequibles. Los packs navideños de Nintendo Switch OLED rentan por incluir varios juegos de regalo (y tanto la versión estándar como la exclusivamente portátil, 'Lite', están disponibles a precio reducido).

Por su parte, Xbox Series S (sin lector de discos) incluye tres meses de suscripción a su propio 'Netflix de los videojuegos' (Xbox Game Pass), por lo que basta conectarla al televisor y disfrutar de un centenar de juegos listos para descargar.

Quienes gusten de lo retro se alegrarán de recibir, finalmente, consolas portátiles dedicadas como la Evercade EXP-R. Es compatible con cartuchos intercambiables repletos de juegos clásicos, hablemos de la trilogía Tomb Raider o de los títulos más celebrados para las primigenias máquinas de Atari.

Los relojes inteligentes les vienen al pelo por sus sensores de detección de caídas: emiten una señal de alerta a los contactos preestablecidos (y a los servicios de emergencia) para que tomen cartas en el asunto lo antes posible.

Tampoco está de más obsequiarles un altavoz inteligente por su facilidad de uso: además de darles conversación (lo que se ha demostrado que mitiga la soledad), les permite preguntar o solicitar de viva voz cualquier cosa que se les ocurra. Si los combinamos con bombillas, estores o termostatos inteligentes, las personas con movilidad reducida no tendrán que hacer el esfuerzo de levantarse para apagar las luces, poner la calefacción o bajar las persianas.

¿Tu pareja trabaja desde casa? Necesita urgentemente unos auriculares con cancelación de ruido (ideales para concentrarse) o un ratón vertical. Estos últimos descansan la muñeca y fomentan una postura natural del antebrazo.

Las tazas con temperatura programable (para que el café o el té se mantengan calientes sin importar el tiempo que pasemos frente al ordenador) y los escritorios elevables serán otros aciertos seguros. Y es que se ha demostrado que permanecer mucho tiempo sentados incrementa nuestras probabilidades de padecer varias enfermedades cardiovasculares.

Por último, ahora que lo vintage ha vuelto a ponerse de moda, puede ser buena idea echarle un vistazo a un tocadiscos con Bluetooth; un walkman para digitalizar cassettes (numerosos grupos actuales lanzan ya sus trabajos en cinta y vinilo); o una impresora fotográfica que permita materializar las instantáneas que almacenamos sin miramientos en la galería de nuestro móvil.