![Amnesia digital: ¿cómo afectarán las nuevas tecnologías a las funciones cerebrales?](https://s1.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/multimedia/202210/10/media/cortadas/amnesia_601-kRnE-U1803285321813tD-624x385@RC.jpg)
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SARA BORONDO
Lunes, 10 de octubre 2022, 18:46
sara borondo
El uso cada vez mayor del móvil, la tablet o el ordenador preocupa a los psicólogos. No solo por el riesgo de 'enganche'. También por las consecuencias que podría tener a largo plazo en nuestras funciones cerebrales acciones como delegar los recordatorios de ... cumpleaños o citas en los calendarios y alarmas del smartphone y confiar en Internet para consultar cualquier dato o duda. De manera que cada vez necesitamos memorizar menos información porque la tenemos almacenada en el teléfono. Los expertos también quieren comprobar cómo afecta a la capacidad de concentración y de atención el hecho de estar realizando varias tareas de manera simultánea: mientras estamos delante del ordenador nos metemos a consultar las redes sociales, navegamos por Internet, escuchamos música o tenemos una serie o película de fondo...
No parece muy probable que las zonas de nuestro cerebro relacionadas con la memoria vayan a atrofiarse así 'de repente', ya que los cambios evolutivos no son cuestión de décadas, sino de etapas muchísimo más largas. Pero, por otro lado, el cerebro tiene la capacidad de adaptarse rápido al entorno y parece que lo está haciendo de la misma manera que en el pasado lo hizo con otras tecnologías.
Hoy en día es un gesto cotidiano buscar algo en Google, así que es menos probable que esa información la recordemos después. La memoria exige una gran cantidad de procesamiento cerebral, ya sea memoria a largo plazo, semántica, episódica... y –explica Pilar Pina, psicóloga del Hospital Universitario Quirónsalud de Madrid– «funciona como un músculo. Si lo entrenamos, responde mejor. El cerebro fuerza los recuerdos cuando hacemos el esfuerzo de recordar. Pero si no utilizamos esta función, el cerebro tenderá a olvidar lo que es irrelevante». ¿Estamos perdiendo entonces capacidad de memorizar? No. «Eso no quiere decir decir que la función no exista. Todas las funciones ejecutivas que conforman el funcionamiento cerebral, como la memoria, la capacidad de atención, la capacidad visoespacial, etc., están disponibles si hacemos uso de ellas. Son entrenables», insiste la experta.
Pina no cree factible que el uso creciente de la tecnología se traduzca en una pérdida de la capacidad memorística, «pero sí diría que las nuevas tecnologías están interviniendo en que algunas de estas funciones se relajen y otras se incrementen». En esta dirección apuntan los estudios científicos más recientes, que sostienen que, al liberar parte del cerebro de la necesidad de memorizar –'efecto Google'–, se puede mejorar la capacidad de procesar información, de manera similar a cómo se perdió el hábito de realizar operaciones matemáticas con la aparición de la calculadora. Uno de estos estudios es el realizado por el Instituto de Neurociencia Cognitiva del University College de Londres (Reino Unido) y concluyó que al almacenar en los dispositivos móviles lo que antes se guardaba en la memoria de la persona —convirtiéndose en una especie de memoria externa—, el cerebro, conocedor de que la información más importante está a buen recaudo, puede recordar otros datos adicionales menos relevantes.
La atención es otra función cerebral que está bajo la lupa de los investigadores. Y, en este caso, sí hay más consenso en la idea de que la multitarea hace que el cerebro se disperse, se centre en estímulos irrelevantes y se distraiga fácilmente, además de estar pendiente de si llegan más estímulos nuevos, lo que puede llegar a estresarnos. «Los estudios avalan que nuestro rendimiento en cualquier tarea se ve afectado por la sobrecarga de información. Al igual que estar 'en alerta' sin necesidad de estarlo mitiga nuestra capacidad de atención, tener múltiples distractores interviene de modo negativo en el modo en cómo procesamos la atención. Nuestro cerebro es plástico y dinámico, pero necesita orden para poder ejecutar lo que le pedimos. Hoy en día sabemos que tanta información interfiere directamente en nuestras pautas de sueño e incluso de alimentación», advierte la psicóloga. Dice que estar pendiente del correo durante una videollamada o mirando los mensajes del teléfono provoca que el cerebro no pueda procesar de manera completa la información de ninguna de las tres actividades.
No obstante, «faltan estudios longitudinales que demuestren con datos ciertas afirmaciones que hacemos hoy sobre la influencia de la tecnología o el abuso de ella para poder contestar con datos si el cerebro puede colapsarse. Pero es una probabilidad», se muestra prudente Pina. Otra cosa es lo que ya se está viendo en consulta, problemas derivados del hecho de vivir rodeados de ordenadores y pendientes del móvil: «Modificación de las interacciones sociales, percepción de falsos conflictos, ideas de negatividad etc», enumera Pina.
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