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La borrasca Nelson ha dejado su impronta en Valladolid en forma de árboles caídos, señales tumbadas y cubiertas de edificios desprendidas. Las numerosas incidencias registradas en la ciudad han llevado a los Bomberos de Valladolid a intervenir a lo largo del día de hoy en ... más de 70 incidentes, lo que ha obligado al parque a activar el retén y a sacar a las calles hasta 38 efectivos al unísono, que han trabajado para paliar los efectos de un viento que llegó a un pico de 81 kilómetros por hora a las 16:00 horas.
La labor de los Bomberos se ha visto reforzada por la de agentes de la Policía Municipal y miembros del Agrupación de Protección Civil, que han trabajado durante una intensa jornada. Entre los incidentes más impactantes del día se encuentra la caída de uno de los grandes chopos que pueblan la mediana del paseo Farnesio, en La Delicias, o la de árboles y ramas en la calle Padre José Acosta, en Parquesol.
Las fuertes rachas de viento movieron contenedores de sitio, interfiriendo en el tráfico en varios puntos de la capital, y entre los sucesos más relevantes se encuentra también la caída de una antena en la calle Colón, misma vía en la que la usuaria de un patinete eléctrico tuvo que ser trasladada al hospital tras, al parecer, vencer a la fuerza del viento y caerse de su vehículo de movilidad personal. El balance de heridos en la capital se completa con un suceso registrado sobre las 15.40 horas, cuando la Policía Municipal de Valladolid solicitó al 112 asistencia sanitaria para un hombre que recibió un golpe en un brazo de una sombrilla en la céntrica calle Constitución de la ciudad, por lo que también tuvo que ser trasladado en una ambulancia de soporte vital básico al Hospital Clínico de Valladolid.
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Como suele ser habitual en estos episodios, el Campo Grande ha permanecido cerrado por segundo día consecutivo y, a pocos metros de allí, la Feria de Artesanía instalada en la acera de Recoletos se vio muy afectada por el fuerte vendaval. Algunas de las carpas instaladas salieron volando y se llevaron por delante varios puestos, uno de ellos el de David Lagarejos, que llegó a la ciudad dispuesto a vender hornos y cazuelas de Pereruela, pero el viento le ha obligado a marcharse cinco días antes de lo previsto. «Cuando ha sucedido todo no estábamos porque la feria se cierra de 14:30 a 17:30 horas. Cuando hemos venido de comer nos hemos encontrado con las carpas levantadas y con todos los puestos rotos. No he cuantificado exactamente los daños, pero 'grosso modo' habré perdido unos 2.000 euros», explica Lagarejos poco antes de hablar pormenorizamente de lo que ha perdido por culpa del viento. «Ha machacado prácticamente todo el mobiliario que utilizamos para poner los productos y, aunque tengo stock, no tengo donde poner la mercancía. No podemos continuar, aunque en un principio teníamos que estar aquí hasta el domingo», señala.
El centro de emergencias 112 de Castilla y León recibió hasta las 19.00 horas un total de 775 llamadas por los efectos del viento en toda la comunidad y dio aviso por más de 480 emergencias relacionadas con incidencias a causa de las fuertes rachas. Una de las incidencias por las que recibió más avisos el Centro de Emergencias (36 en concreto) es la caída de un panel informativo en el kilómetro 410 de la autovía A-11, sentido Valladolid, en Pedrosa del Rey. En este caso, el 112 dio aviso al subsector Tráfico Valladolid de la Guardia Civil, que resolvió la incidencia con personal del servicio de conservación de carreteras de esa vía.
Numerosos pueblos se han visto afectados por el viento, que también ha dejado importantes daños en la provincia. Uno de los municipios afectados es La Cistérniga, donde se cayeron siete árboles y cuatro de las chapas de la cubierta del Centro de Salud, tal y como indica el alcalde, Alberto Redondo. «Ha habido mucho viento y nos ha tirado siete árboles, señales y las chapas del centro de salud. Las rachas han sido más fuertes de lo que suele ser normal aquí. Han tenido que venir los Bomberos de Peñafiel porque los demás estaban en otras salidas», indica el regidor.
Otro de los municipios que ha sentido el paso de la borrasca Nelson es Medina de Rioseco, donde se desprendió una plancha de la cubierta de la sede de la Cruz Roja, se cayó parte de la cubierta de la iglesia de San Pedro, una ráfaga llegó a mover un letrero en la calle Cantareros y ramas de grandes dimensiones de varios árboles acabaron en el suelo de las calles Quinto Centenario y Castillo. El balance de daños en la provincia es muy extenso y otro de los puntos en los que se han producido incidencias relevantes es Mota del Marqués, donde todo un tejado de chapa de un corral se desprendió y obligó a desplazarse a los Bomberos del parque de Tordesillas.
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