A la venta uno de los antiguos cuarteles de Arco de Ladrillo

Imponente estética. Gran edificabilidad. Buena ubicación. Enormes posibilidades. Son los reclamos con los que se asoma al mercado inmobiliario el antiguo cuartel de artillería General Monasterio, que busca comprador después de casi medio siglo de uso militar y de 23 años de abandono. El inmueble, situado en el Arco de Ladrillo, 37, forma parte de los viejos terrenos del Ejército en los que hoy se perfila el nuevo barrio de cuarteles, cuya urbanización ya está muy avanzada (está previsto que concluya a finales de este año) y donde ya se han puesto a la venta varias promociones de viviendas.

Este antiguo cuartel de artillería presenta una superficie construida de 2.929 metros cuadrados, con tres plantas (baja más dos) y una edificabilidad de 3.500,63 metros cuadrados, que deberá dedicarse a uso terciario.

Así, el edificio podrá albergar la sede de una empresa, un hotel, una residencia juvenil o de mayores, un negocio de hostelería, cultural o recreativo. Los propietarios actuales (una empresa vallisoletana que quiere venderlo) han diseñado un proyecto con 80 apartamentos tutelados, en una opción que no es vinculante para el futuro comprador. El inmueble sale a la venta por un precio de 2,5 millones de euros y cuenta con un nivel de protección P3, que obliga a respetar la fachada, estructura, tipología y envolvente exterior. Sí que se podrá modificar el bajo cubierta, «lo que permitirá, por ejemplo, abrir huecos en el tejado tipo velux», explica Luis González, gerente de Metro Inmobiliaria, la empresa encargada de comercializar este inmueble.

Proyectado en 1949 (con modificación en 1952), el cuartel general Monasterio finalizó su construcción en 1953, en un inmueble diseñado por los ingenieros Lorenzo Carrasco Zamorano y Mariano Baratech Zalarre. El proyecto inicial incluía dos pabellones independientes enlazados por porches, con un gran patio de armas y motivos barrocos típicos de la tradición castellana. El bloque principal (que es el que se ha puesto en venta) está ejecutado en ladrillo sobre zócalo de piedra, con empleo de piedra artificial en pilastras, jambas y repisas y estructura de muros de carga y hormigón, tal y como recoge el informe técnico del edificio.

Desde ese año 1953, este edificio de Arco de Ladrillo (situado junto a la sede del Regimiento Farnesio de Caballería) albergó el cuartel de Artillería 26, que recibió el nombre de José Monasterio, capitán general de la V Región Militar y procurador en Cortes, quien falleció en 1952. En un primer momento, se había pensado bautizar el cuartel como Isabel la Católica pero, finalmente, se optó por el nombre de este militar. El 29 de marzo de 2000, estas instalaciones militares cerraron sus puertas, con el traslado de sus servicios a la base militar El Empecinado.

Desde entonces, la propiedad ha vivido un periplo de 23 años de abandono y okupaciones (sus ventanas y accesos fueron sellados en varias ocasiones) que ahora se quieren dejar atrás. El informe del catálogo de arquitectura e ingeniería reconoce que el interior se encuentra «sin uso y en un deficiente estado de conservación, desprovisto de carpinterías y con huecos cegados». Sin embargo, esta situación puede favorecer las tareas de rehabilitación interior, tal y como resaltan desde Metro Inmobiliaria, que destacan además que el edificio se encuentra en una zona de atractiva expansión urbanística.

Se halla inserto en las parcelas de los antiguos talleres de Artillería, que conectan el paseo de Farnesio con las calles General Shelly y Nelson Mandela. Allí está previsto construir 675 viviendas en distintos bloques de pisos. La urbanización (su proyecto se aprobó el 24 de noviembre de 2021) ya permite distinguir las nuevas calles que se abrirán en la zona y que conectan con Arco de Ladrillo o el parque de la Paz, en Delicias. «Es una muy buena zona que se verá beneficiada por el futuro desarrollo urbanístico de la ciudad», asegura Gonzalez, quien recuerda que su cercanía con el centro se acentuará bien con el actual proyecto de integración (a través del túnel diseñado para Arco de Ladrillo), bien con la promesa de soterramiento del PP (que podría gobernar con el apoyo de Vox en el Ayuntamiento).

Para tomar las imágenes en dron que acompaña este reportaje, Metro Inmobiliaria tuvo que tramitar hasta seis permisos, ya que estos terrenos todavía están tipificados como suelo militar. De hecho, el dron no pudo sobrevolar el interior de la parcela y solo pudo tomar imágenes desde las calles adyacentes, como el Paseo de Farnesio o Arco de Ladrillo.

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