Rondilla-Barrio España y Fuente Berrocal respiraron el mejor aire de la ciudad en 2022 y Moreras, el peor

Así se desprende del Índice Nacional de Calidad del Aire, en el que, a la espera de los informes definitivos del Ministerio para la Transición Ecológica, sitúa a Valladolid como una de las grandes ciudades de España con menor nivel de contaminación. Una circunstancia de la que se congratula la concejala de Medio Ambiente, María Sánchez, quien destaca que el plan de acción en materia de contaminación, puesto en marcha hace un lustro, «se ha demostrado válido». «Ha sido un caballo de batalla en el Ayuntamiento con la oposición, pero entendemos que en cuestiones de salud hay que hacer pedagogía y tomar medidas», sostiene la responsable del área.

En concreto, en la capital vallisoletana se superaron los valores de partículas en suspensión y ozono. «Son los contaminantes que más problemas nos causaron en 2022. Estuvo muy influenciado porque hubo bastantes intrusiones por polvo africano, y casi todas las superaciones de partículas en suspensión se dieron coincidiendo con esos episodios, en los que había un espesor muy fuerte», asevera la también portavoz del Grupo Municipal de Toma la Palabra.

Influyeron también los incendios forestales de Zamora, Ávila y León, que se tradujeron en episodios de contaminación en la ciudad. No se superaron, sin embargo, los valores límite de dióxido de nitrógeno, uno de los gases emitidos por la combustión de vehículos.

En total, según los datos que maneja Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, a lo largo del ejercicio anterior se superaron hasta en 19 ocasiones los valores recogidos en el citado plan, «la mayoría de las veces relativas a episodios naturales de contaminación en los cuales se informó pero no se activaron medidas restrictivas». Concretamente, hubo once capítulos de contaminación por partículas, de los que nueve fueron por episodios africanos. «Entendemos que las activaciones del plan son cada vez más puntuales. Cuando lo pusimos en marcha, tuvimos que activar sobre todo el nivel 1 e incluso implementar cortes al tráfico; eso cada vez ha ocurrido menos», continúa María Sánchez.

En cuanto a las zonas, el Índice Nacional de Calidad del Aire contabiliza siete estaciones de medición de la contaminación distribuidas por la ciudad. Fueron tres las que registraron mejores valores:Energyworks-VA1 (Barrio España-La Rondilla), Energyworks-VA2 (Fuente Berrocal) y Valladolid Sur (ubicado en el Camino Viejo de Simancas).

Fueron las tres únicas zonas que no tuvieron –según el balance provisional– ningún día en el que la calidad del aire fue «desfavorable» o «muy desfavorable». Mientras que en Barrio España-Rondilla la calidad fue «regular» durante el 2% del año, en Fuente Berrocal y Valladolid Sur este porcentaje se eleva al 3%, lo que se traduce en once días en ambos casos.

La cara opuesta la representa la zona de Las Moreras. El medidor Puente Regueral fue el que peores datos registró, con un 5% de sus días con el aire «desfavorable» y el 1%, «muy desfavorable». No obstante, casi la mitad del año –44%– fue «razonablemente bueno». Tras ello, en 'peores' datos le sigue Arco de Ladrillo II (entorno del Campo Grande), con el 4% de las jornadas con la calidad «desfavorable», el 1% «muy desfavorable», si bien el 56% el aire fue «razonablemente bueno» (204 días). Seguidamente está La Rubia II –paseo de Zorrilla, a la altura del Lava, aproximadamente–, que tuvo quince días una calidad «desfavorable o muy desfavorable», mientras que 204 fueron «buenos».