Valladolid remata la renovación del firme en quince calles de La Vuelta ciclista

Esta campaña, habitual en los veranos de la capital, este año se ha adelantado varias semanas con el compromiso de terminarla a mediados de agosto (y no a finales de mes, como es habitual).

El cronograma inicial preveía que los trabajos concluyeran el 12 de agosto, justo antes del puente del día 15. Finalmente, las máquinas han parado con tres días de antelación sobre el calendario previsto. La intención era no pillarse los dedos y llegar con suficiente anticipación a la celebración de la carrera ciclista.

Así, se ha librado una carrera contrarreloj previa a La Vuelta para acometer unos trabajos incluidos en un contrato global cifrado en 2.065.500 euros (adjudicado a la UTE Collosa-Pasaval).

De ellos, 1.875.000 euros estuvieron incluidos en el presupuesto ordinario de la Concejalía de Movilidad y Espacio Urbano (tramitado por el anterior equipo de Gobierno). Había que sumar otros 187.500 euros, incluidos en las cuentas de Aquavall, que todos los años reserva una partida para «pequeñas renovaciones, ampliaciones o reformas» que afectan a las vías incluidas en este contrato.

Desde el Consistorio reconocen que el estado en el que se encontraban las vías por las que competirán los ciclistas no estaban en malas condiciones generales, pero sí que había que acometer una intervención especial si se quería que el asfalto estuviera en condiciones óptimas para garantizar la seguridad de los participantes en La Vuelta.

En los casos en los que el firme presentaba peores condiciones («más deteriorado o agotado») ha sido necesaria la renovación de la capa de rodadura mediante el fresado y su sustitución por un nuevo extendido de aglomerado asfáltico en caliente. En algunos casos, estos trabajos se han acometido de noche para afectar lo menos posible al tráfico, ya que se trataba de varias de las arterias principales de la ciudad, como la carretera de Rueda, la avenida de Salamanca, Padre José Acosta, Sánchez Arjona o, más recientemente, Poniente y Bajada de la Libertad.

En otros casos, el diagnóstico no obligaba a una intervención tan profunda, con lo que se prefirió el sellado de juntas y de grietas. Al ser unos trabajos que no interfieren tanto en el tráfico, se situó estas obras al principio de la temporada (entre mediados de mayo y mediados de junio), cuando todavía hay colegios, las vacaciones quedan lejos y la circulación es mayor por la capital.

Menos intensiva ha sido la tercera alternativa, con el extendido de 'slourry', un microaglomerado en frío que se reserva para «aquellas capas cuya erosión superficial ya ha comenzado, pero carecen de deformaciones u otros daños de mayor entidad». Así, con este gesto casi quirúrgico,«se frena la erosión y se mejora la rodadura, con una inversión mucho menor que una renovación del aglomerado», explican los técnicos encargados de decidir qué tipo de obra se llevaba a cabo en cada una de las calles.

Al final, las grandes beneficiadas de esta campaña de 2023 han sido esas vías por la que discurrirá la prueba ciclista. El paseo de Isabel la Católica será el centro de operaciones para la salida de la contrarreloj.

Allí se instalará toda la logística antes de encender el cronómetro para cada ciclista, que echará a rodar en la plaza de Poniente. Desde allí circularán unos metros por Isabel la Católica para atravesar el Pisuerga por la avenida de Miguel Ángel Blanco. Los deportistas dejarán a su izquierda la Cúpula del Milenio y girarán por Joaquín Velasco Martín hacia Sánchez Arjona y Padre José Acosta. Recorrerán después Mieses y las avenidas del Mundial 82 y Real Valladolid, para subir a continuación a Parquesol y atravesar Villa de Prado por la calle San Lorenzo del Escorial. Volverán a salvar el río para ingresar en el Paseo de Zorrilla, que recorrerán completo hasta Covaresa.

Después de girar por Miguel Delibes, entrarán en la Cañada Real, llegarán al Pinar de Antequera y volverán rumbo al centro de la ciudad para conocer su marca al alcanzar la meta, en la plaza de Zorrilla, a la altura de la Academia de Caballería.

Las calles de este trazado en su tramo urbano han formado parte de esta campaña de aglomerado. Entre las vías con reasfaltado se han encontrado Mieses, padre José Acosta o el Paseo de Zorrilla. El sellado se ha llevado a cabo en las avenida del Mundial 82, Real Valladolid, el paseo de Isabel la Católica y la calle Monasterio San Lorenzo del Escorial. En tramos de esta vía se ha optado también por el 'slourry' (la calzada sur), así como en la avenida del Real Valladolid, entre Mundial 82 y Adolfo Miaja de la Muela.

Además de las calles que forman parte de la etapa de la Vuelta Ciclista, la renovación del pavimento también ha llegado a barrios como Las Flores, La Victoria o el polígono de San Cristóbal (en Cobalto), con una menor intervención que otros años en calles del centro de la capital.