Valladolid recuerda a las víctimas de accidentes de tráfico

La fatalidad llegó casi a la media noche de aquel 15 de abril de 2011, cuando un todoterreno arrolló a la Vespa que conducía José a la altura de la antigua Azucarera. En representación de la familia, Ana Maroto, la prima de José Miguel, ha subido este mediodía al escenario instalado en la Acera de Recoletos para celebrar el Día Mundial en recuerdo de las víctimas de accidentes de tráfico (que tiene lugar el tercer domingo de noviembre) para dirigir unas palabras a los presentes.

«A ese homicida le cayeron dos años y medio de condena a mi primo y a su novia les condenaron a la eternidad. Penas más duras por favor», decía emocionada la mujer antes de bajar del escenario.

Fue uno de los emotivos momentos que se vivieron durante una jornada que sirvió para dejar claras dos cosas: conseguir el objetivo de víctimas cero en carretera y concienciar sobre lo evitables que son los accidentes si se respetan las normas de conducción segura.

Para apoyar este acto, medio centenar de motoristas recorrieron el centro de Valladolid en una marcha que sirvió para recordar a los que perdieron la vida en el asfalto. Sus motos solo hicieron ruido para romper el minuto de silencio. Con sus cascos señalando al cielo los motoristas hicieron sonar sus motores en honor a los que quedaron en el camino. Un bonito y sencillo gesto aplaudido por asistentes, autoridades y familiares emocionados.

Concejales del Ayuntamiento de Valladolid, personal de Diputación, de la Jefatura de Táfico, representación de las Policía Local, de la Guardia Civil, de los Bomberos, estuvieron presentes para apoyar a las asociaciones que luchan por conseguir que no haya víctimas en carretera.

«El número de víctimas por accidentes de tráfico son muchos desde hace muchos años. Al lado de esos fallecidos están las familias, los amigos, los hermanos. Esa madre que tarda años en recuperar la normalidad pedimos prudencia al volante, no bebamos ni tomemos sustancias», señaló la subdelegada del Gobierno en Valladolid, Alicia Villar.

Y ha continuado su intervención para agradecer la implicación y la labor de asociaciones como Asociación por la prevención de accidentes de tráfico (Aesleme), Ayuda a víctimas de accidentes de tráfico y asegurados (Avata), la Plataforma Motera para la Seguridad Vial y la Asociación de Motoclubes de Valladolid, «que el año que viene podamos estar satisfechos por haber reducido el número de víctimas en carretera», ha finalizado.

Por su parte, el presidente de la Diputación, Conrado Íscar, ha hablado de «una pandemia mundial a la que se le da muy poca visibilidad. Es además la principal cause de mortalidad entre jóvenes de 15 y 29 años», ha detallado.

«Desde 1999, año del que hay registro, se obtuvieron datos de 9.344 fallecidos y en 2019, de 1.755 y más de 4.000 personas que requirieron hospitalización. Son datos inaceptables y, por eso, es nuestro deber reducir la siniestralidad y evitar la reincidencia».

Tras varias piezas interpretadas por una decena de alumnos del Conservatorio Profesional de Valladolid, que han querido poner la nota musical a esta jornada, ha tenido lugar la lectura del manifiesto a cargo de la coordinadora de Aesleme Valladolid, Mari Paz González. Un fatal accidente le dejó en silla de ruedas hace 27 años. Por eso, en su discurso ha lamentado que este sea «un año muy negro en carretera» y ha destacado además «el dolor de las lesiones y las consecuencias que padecemos los que quedamos aquí. No nos olvidéis», ha finalizado.