Valladolid despide el octubre más cálido de la historia y el mes más lluvioso de 2022

El mes pasado concluyó a su vez en la capital con una temperatura media de las máximas de 23 grados (lejos del récord absoluto de 2017, con 24,4) y unas más inusuales aún temperaturas mínimas, con 11,1 grados de media, 3,1 por encima de lo habitual (8). No hubo picos históricos en cuanto a las máximas, que alcanzaron un pico de 29,2 grados el día 3, y un pico quizás menos frecuente de 24,3 el día 27 (para ese día de finales de mes sí fue la máxima más alta alcanzada jamás). También hubo, en este sentido, mínimas poco habituales como los 15,7 grados registrados ese mismo día 27 (casi el doble de lo normal).

La temperatura media en el conjunto de Castilla y León fue también la más alta registrada desde un lejano 1961, con 15,2 grados (3,5 por encima de lo habitual), y este mismo récord se batió en seis de las nueve provincias (todas salvo León, Palencia y Salamanca).

Pero octubre no solo dejó mucho más calor del habitual sino que también cortó la serie de cinco meses consecutivos de sequía. Tanto es así que durante el mes se recogieron 71,8 litros por metro cuadrado, 10,5 más de lo habitual (61,3), una cantidad que supera con creces toda la lluvia registrada en Valladolid entre los meses de mayo y septiembre (56,2 litros). Fue el mes más lluvioso del presente año y el tercero con superávit de precipitaciones -solo en marzo (45,6) y abril (60,2) se recogieron cantidades superiores a las habituales-.

Los más de setenta litros recogidos en octubre minimizan, al menos, el déficit hídrico de 2022, que ahora se sitúa en el 27,6%, con 244,8 litros por metro cuadrado recogidos durante los diez meses, 93,3 menos de lo habitual a estas alturas del año (338,1) para el periodo de referencia 1990-2020.

Las previsiones a medio plazo de la Aemet apuntan a que el trimestre en curso, de noviembre a enero, volverá a ser más cálido de lo habitual (con un 40% de probabilidades) y normal, en principio, en cuanto a precipitaciones en el oeste de la península. Noviembre, en este sentido, ha comenzado con temperaturas moderadas, solo ligeramente más altas de lo habitual, y este jueves se han registrados las primeras lluvias (con apenas tres litros por metro cuadrado recogidos) de un mes llamado a ser el segundo más lluvioso del año, con una cantidad media habitual de 50,3 litros (para el periodo de referencia 1990-2020).

Las previsiones a corto plazo apuntan a que las temperaturas, especialmente las mínimas, caerán durante los próximos días hasta situarse por debajo de los cinco grados, con las máximas en torno a los quince.

En lo que va de año se han registrado ya ocho meses más cálidos de lo habitual (todos salvo marzo y abril) y siete con menos precipitaciones de lo normal (todos salvo marzo, abril y octubre). El primer semestre del año fue, en este sentido, el quinto más seco del presente siglo XXI, con 145,1 litros. De aquí a final de año deberían caer, al menos, en torno a 95 litros por metros cuadrado, la cantidad habitual para los meses de noviembre y diciembre. Para evitar el déficit hídrico tendría que recogerse el doble.