Valladolid adapta 92 paradas de Auvasa con plataformas para subir mejor al autobús

Las intervenciones sirven para solventar las carencias en accesibilidad que presentaban una parte significativa de las 575 paradas que tiene la red de Auvasa (de acuerdo con las cifras que se recogen en su página web). En la mayoría de estas 91 paradas afectadas, se ha trabajado para facilitar la accesibilidad de personas invidentes. Así, se ha pintado una línea de color amarillo (con un ancho mínimo de 40 centímetros) junto al bordillo de la parada y se ha señalizado el pavimento con una franja de detección tacto-visual de acanaladura, de 120 centímetros de ancho, que discurre de forma transversal en la acera desde la fachada (o la parte más exterior del itinerario peatonal) hasta ese bordillo marcado en amarillo. De esto modo, al ser una franja podotáctil, se facilita a las personas invidentes que detecten con el bastón dónde está la parada y dónde el punto en el que han de coger el autobús. Además, los postes cuentan con información sobre identificación y denominación de la línea en sistema Braille.

Esta ha sido la intervención más extendida (en casi 60 de las 91 paradas), pero un importante número de ellas se han adaptado también para facilitar el acceso de las personas con movilidad reducida y que el despliegue de la plataforma desde el autobús se haga con todas las garantías. Por eso, se han construido unas plataformas que facilitan la aproximación del autobús a la acera. Para esta acción se ha tenido en cuenta los criterios del Centro de Movilidad, departamento que ha decidido, en función del tráfico que asume cada calle, si este acceso se hacía en el propio carril (con una plataforma construida a costa de plazas de aparcamiento) o bien con una dársena específica que permite liberar al tráfico el carril mientras se produce el embarque y desembarco de pasajeros.

Algunas de las paradas en las que se ha creado una plataforma para que los autobuses paren en el carril son Avenida de Burgos 27 y 72, Cañada Real 74 y 144, Oro 4, Plomo 2 y 43, plaza del Dr Jiménez Díaz esquina con Penitencia o Villabáñez 131. Y esta medida llegará también a Miguel Delibes 40, Adolfo Miaja de la Muela 6, Martín Santos Romero frente al número 60 o Prado de la Magdalena 6, entre las más relevantes.

Las obras han tomado también la calle Vázquez de Menchaca, en el polígono de Argales. Y este caso es significativo, ya que la construcción de estas nuevas plataformas son una evidencia (ya no provisional) de las nuevas rutas que han asumido varias líneas de autobús después de que se prohibiera el paso de los vehículos de Auvasa por el maltrecho viaducto de Daniel del Olmo, por el que circulaban diez líneas que han tenido que buscar alternativas (16, 26, C1, C2, H, P1, P2, P7, PSC1 y PSC3). De hecho, la prohibición de que los autobuses transiten por ahí ha dejado sin uso algunas paradas y marquesinas de Daniel del Olmo, cuya reserva (ahora sin uso) aprovechan los conductores para aparcar sus vehículos.

En algunos casos, además, se ha aprovechado esta intervención para colocar una nueva marquesina en varias paradas. Es el caso, por ejemplo, de Fuente el Sol 2 con la plaza de San Bartolomé (en La Victoria), el Paseo del Cauce (a la altura del centro de salud Pilarica), la plaza de España 12 (iglesia de Capuchinos), el Paseo de Zorrilla, 10, Embajadores 71 o Azalea, esquina con Alhelí (en Las Flores).

Para decidir qué puntos tienen marquesina o solo un poste de señalización, Auvasa analiza los datos de uso de cada una de estas paradas. Las marquesinas se instalan en aquellas que presentan un alto porcentaje de utilización. Y, además, se tiene en cuenta si son paradas de subida (ahí se prioriza la marquesina) o de bajada. Así, en estas seis paradas con nueva marquesina se ha detectado un aumento significativo en el número de usuarios y también se ha tenido en cuenta las peticiones vecinales.

En el caso de las marquesinas, se debe permitir el acceso (bien de poema lateral o por la parte central) con un ancho libre mínimo de paso de 90 centímetros. Si los cerramientos verticales son transparentes o translúcidos, para evitar choques o accidentes, deben llevar dos bandas horizontales de entre 5 y 10 centímetros de ancho, de colores vivos y contrastados (la primeras a una altura entre 70 y 80 centímetros y la segunda, de 140 a 170 centímetros desde el suelo). Deben disponer de apoyo isquiático y algún asiento (con una altura aproximada de 45 centímetros y reposabarazos al menos en su lateral exterior).

Este es el listado completo de las paradas incluidas en esta inversión de adaptación a la normativa de accesibilidad.

Aunque el proyecto inicial hablaba de 91 paradas, al final las obras se han llevado a otro punto más de la ciudad. Se trata del ubicado en el paseo de Isabel la Católica esquina con la plaza del Poniente (en el lateral del instituto Núñez de Arce). Esta acción se ha incorporado al listado por una petición especial de Auvasa y del Centro de Movilidad. El objetivo es trasladar a esta nueva ubicación la parada de los autobuses interurbanos que hay antes del cruce y poder separar el tráfico de autobuses de los urbanos (Auvasa), que se mantendrán en el lugar anterior. Esta parada incorpora también marquesina de espera.

La inversión total de 1.047.312 euros está financiada con fondos Next Generation de la Unión Europea, con cargo al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.